Crítica teatral: Coses nostres, en la Sala Atrium.

vertic_880_0La sala Atrium es un seguro, hoy por hoy, de un teatro contemporáneo que se apropia de la realidad que nos rodea para analizarla sobre el escenario y hacernos reflexionar sobre nosotros mismos. Un nuevo ejemplo de ello es Coses nostres, la primera obra escrita y dirigida por Ramon Madaula y que nos habla del teatro, de la crítica y de la interactuación entre ambas disciplinas.

«El director de un teatro público y un reputado crítico se encuentran para hablar de «sus cosas». En el transcurso de la conversación aparecen varias cuestiones: ¿Cómo y quién determina la calidad artística? ¿La crítica tiene prejuicios? ¿El éxito o el fracaso de un espectáculo puede depender del tratamiento que le da la prensa? ¿Las ayudas públicas pueden dormir el genio? ¿Qué es más importante para un artista, el coraje o talento? Todas las preguntas tienen un “depende” como respuesta, pero todas son necesarias para ellos. Los dos hombres se necesitan. ¿Llegarán a algún tipo de pacto?»

Madaula nos propone, en su estreno como dramaturgo, un debate sobre el teatro que nos abastece de temas interesantes sobre los que reflexionar y una mirada recelosa hacia la crítica. Todo tiene lugar en el espacio de creación de un teatro público donde se han citado su director y un reconocido crítico. De ahí que se traten temas de debate que parecen ya clásicos: ¿Qué es el arte? ¿Cómo se establece la calidad artística? o si las subvenciones han amortiguado el talento artístico. Madaula trata estos temas poniéndose en parte «a favor» del creador, como no podría ser de otra forma, y aguijoneando al crítico, del que poco a poco iremos conociendo cuáles son sus desvelos y carencias, lo que nos hará dudar sobre si la crítica es objetiva o no.

1429256120De todo ello posiblemente la reflexión más interesante sea la de que, en verdad, el arte tan solo necesita que haya alguien que tenga algo que decir, un razonamiento interesante y eficaz. Si bien, la representación adopta un toque algo maniqueo, sobre todo en su segunda parte, cuando la integridad del crítico se irá resquebrajando ante nuestros propios ojos con aquel razonamiento, seguramente cruel y clásico, de que detrás de todo crítico hay un escritor frustrado. Es aquí donde el debate, hasta ese momento casi entre iguales, se convierte en la oportunidad de Madaula para desquitarse con la crítica, los juicios de la cual han afectado y afectan la carrera de cualquier artista. Algo que queda patente en el acto final de la obra, innecesario y que le roba parte de su madurez creativa.

Algo en lo que el texto tampoco acaba de atinar es en la visión que Madaula da al poder de la crítica en la actualidad. En la obra se entrevé un ecosistema de la crítica, con el gran crítico todopoderoso, que creo, y esta es una valoración personal, que o ya no existe o cada vez existe menos, ya que cada vez más la clásica crítica unidireccional y vertical se está transformado, gracias a las nuevas tecnologías, en una crítica compartida y horizontal, hecho este que le roba parte de veracidad al texto a las alturas del siglo XXI en el que estamos.

Para encarnar a los personajes de su primera obra, Madaula ha escogido a Raimon Molins que interpreta al joven director de teatro asaeteado por la última crítica recibida y a Albert Pérez, siempre correcto, en el papel del crítico, un personaje principal en el que es difícil de ver. Ambos interactúan sobre el escenario dándole a la representación el realismo que requiere. La mano de Madaula, por su parte, se deja en un texto muy personal y en la capacidad de los dos actores para apoderarse de la situación escénica.

Coses nostres es un ejercicio de análisis sobre el teatro y la crítica que aunque pone acertadamente el dedo en la llaga, no acaba de ser lo merecidamente neutral que debería, convirtiéndose, a medida que avanza la representación en algo parecido a una «pataleta» de Madaula en contra de una crítica que no siempre está a la altura de su cometido. Aún así vale la pena asistir a su representación y observar cuáles son las preocupaciones de un actor (y ahora director) con una larga carrera teatral a sus espaldas, y por tanto con algo qué decir al respecto. Diga lo que diga la crítica.

«Coses nostres» se representa en la Sala Atrium hasta el 10 de mayo de 2015.

Autor: Ramon Madaula
Director: Ramon Madaula
Reparto: Raimon Molins y Albert Pérez
Puesta en escena: Ramon Madaula
Técnico luz y sonido: Xavier Alabart
Producción: Intent Produccions

Obra ganadora del premio Recull 2014

Horarios: de miércoles a sábado a las 21:00 horas y los domingos a las 19:00 horas.
Precio: 19 € / Existencia de descuentos
Idioma: catalán

NOTA CULTURALIA: 6,5
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Jorge Pisa

“Frank V (opereta d’una banca privada)” al Teatre Lliure: La Banca ni juga ni guanya.

No és el mateix netejar que treure la pols. Aquells que sigueu mestres de casa sabeu quina n’és la diferència. No passa el mateix amb els que us limiteu a complir com a mestressos (també de casa): Només us mou l’ànim de sortir corrent després d’haver passant fugaçment el drap pels desconsolats mobles.

El teatre, l’art d’emmirallar la brutícia humana dins la intimitat de la cambra en què es converteix la platea, reclama que l’escenari exposi sense prejudicis l’atractiu d’allò que és reprovable per a la moral i que converteixi l’espectador en convidat incòmode perquè, com a mínim, hi haurà de passar el dit.

Per això, els intents de maquillar la lletjor esdevenen inútils i fútils. I no ens podem prendre seriosament el “FRANK V” de Friedrich Dürrenmatt si no el sentim com a furiosa comèdia que escupi mala bava des dels seus primers compassos.

L’aparent contradicció rau en el fet que si en Dürrenmatt es va decidir a les darreries dels anys cinquanta a atacar el sistema capitalista des d’una perspectiva àcida i perversa, més de mig segle després de la seva estrena no ve al cas fer-ne un entremès per passar el vespre. Si l’objectiu d’en Friedrich era abraçar l’esperpent, en Sergi Belbel ara no ha de conformar-se signant una versió descafeïnada i rància. Això és el que trobem aquests dies al Teatre Lliure barceloní.

La crònica de la caiguda i enfonsament d’un magnat menyspreable i del seu seguici d’acòlits repulsius s’encalla també en mans de Josep Maria Mestres, incapaç de donar personalitat escènica al producte final: D’una banda, perquè la trama és pueril actualment malgrat alguns detalls faceciosos (l’empleat corrupte que desitja ser engarjolat per poder viure feliç i tranquil; el líder oficial de la colla obligat a mantenir l’anonimat poc després de presentar-se al públic). De l’altra, perquè la posada en escena n’accentua la manca de frescor: El ritme de l’obra és morós; els actors estan incòmodes interpretant-la i la música sona amb pobresa.

Les idees que apunta el text de Dürrenmatt, si s’haguessin potenciat amb un retrat més ferotge dels personatges (la MacbethMónica López de la funció sembla la Bruixa Avorrida; el passerell David Verdaguer aparenta més ingenuïtat encara quan s’integra a la colla) anant més enllà de la comicitat simplista, haurien pogut desembocar en una Casa dels Horrors grotesca i inquietant. I també estem convençuts que el joc de seducció impossible entre el bavejant Ferran Rañé i la maula Laura Aubert ens hauria sacsejat d’entusiasme si el director hagués deixat entrar en la foscor alguna espurna billywilderenca…

 Per Juan Marea

 

FRANK V (OPERETA D’UNA BANCA PRIVADA) es representa al Teatre Lliure de Barcelona fins al 17 de maig.
http://www.teatrelliure.com/ca/programacio/temporada-2014-2015/frank-v-opereta-duna-banca-privada

 

Crítica teatral: La Plaza del Diamante, en el Teatre Goya.

La plaza del diamante_Goya_cartelAsí, a primera vista, sorprende que en Barcelona se estrene una obra de teatro en castellano basada en La Plaça del Diamant, clásico de la literatura catalana del siglo XX escrito poer Mercè Rodoreda. Aunque la cosa se comienza a aclarar cuando descubrimos que la única protagonista es Lolita y que el director es Joan Ollé, con experiencia previa en la adaptación teatral de la novela.

«La plaza del Diamante, de Mercè Rodoreda, se desarrolla en los años de la posguerra. Cuenta la historia de Natalia «La Colometa» una chica que se siente perdida en el mundo. Huérfana de madre, verá partir y morir a sus seres queridos, pasará hambre y miseria y se verá muchas veces incapaz de sacar adelante a sus hijos. Lolita Flores interpreta, con su característica fuerza en los escenarios, este duro monólogo interior, costumbrista y desgarrador, lleno de simbolismos».

Aunque la primera reacción del espectador, como digo, puede ser de sorpresa, todo se explica si analizamos los ingredientes de la obra y vemos el resultado del esfuerzo de producción. Lo primero que hemos de tener en cuenta es que Ollé, como he dicho, tiene experiencia en la adaptación de la obra, ya que en el año 2004 versionó con éxito la obra de Rodoreda en el Festival Castell de Peralada. De aquí que el proyecto quede en manos de un director capaz en sintonía con la novela. A ello se suma el que la obra está construida enteramente para Lolita, que se transfigura a sí misma para dar vida a la Colometa y lo hace con gran acierto, en lo que podría considerarse la clave del éxito del proyecto.

La plaza del diamante_Goya_1La obra se nos presenta como un monólogo, en el que una Colometa ya madura nos narra su vida. Aquí se puede observar el trabajo de filigrana que tanto Carles Guillén como Joan Ollé han realizado en la adaptación, y que da como resultado, también, la transfiguración del texto. La puesta en escena, si bien algo estática, provoca que la atención del público se centre en Lolita y en su narración: sobre el escenario lo único que veremos es un banco de calle y una simple guirnalda de luz que se enciende y apaga acompañando el relato de la historia. Una disposición escénica que recuerda a la anterior versión de la obra realizada por Ollé y que si bien consigue enfocar la atención del público, resulta excesivamente minimalista para el escenario en el que está.

Y por lo que respecta a la historia poco se puede añadir a lo sabido. La novela de Rodoreda nos narra el advenimiento de la Segunda República, la Guerra Civil y los años de la posguerra a través de los ojos y de la sensibilidad de una mujer, la Colometa, que padece los giros de la época en un carácter que suma a la fragilidad emotiva la solidez de un espíritu que respira la vida a bocanadas. Y es aquí donde se observa mejor el esfuerzo de Lolita, con una imagen física muy diferente, casi opuesta, a la Colometa mostrada en la novela, y su transformación para encajar en la piel del personaje y hacernos sonreír y padecer los episodios más felices y tristes de su vida, una culminación debida, sin duda, al duro trabajo de creación interpretativa de Ollé/Lolita.

La Plaza del diamante es, así, una muestra de lo bien que se pueden hacer las cosas cuando hay una idea y se poseen las aptitudes necesaria para llevarla a cabo. Muestra de lo cual es el inmenso aplauso al final de la representación el día del estreno, que sin duda, se repite al cierre de cada actuación.

«La plaza del diamante» se representa en el Teatre Goya del 9 de abril al 3 de mayo de 2015.

Autora: Mercè Rodoreda
Adaptación: Carles Guillén y Joan Ollé
Traducción: Celina Alegre y Pere Rovira
Dirección: Joan Ollé
Reparto: Lolita Flores
Espacio escénico y vestuario: Ana López Cobos
Iluminación: Lionel Spycher
Música original: Pascal Comelade
Producción: Teatro Español
Basada en el espectáculo original La Plaça del Diamant de Bitó Produccions

Horarios: de miércoles a sábado a las 20:30 horas y los domingos a las 18:00 horas.
Precio: 29 €
Idioma: catalán

NOTA CULTURALIA: 8,5
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Jorge Pisa

“El viatge d’Orfeu” de la Cia. InCordis: Amb l’equipatge als peus

El Regne dels Morts té una targeta de visita tan ostentosa que ens amunteguem per visitar-lo. Ens fascina aparentar encara que això mati els que ens fa especials. Enlloc de reivindicar les peculiaritats, insistim a desfilar pels dominis d’Hades, que responen a tants noms com concrecions té l’ambició humana. Per esmentar-be només uns exemples, vet aquí la prosperitat capitalista, la integració en el Món Occidental o el Triomf en l’aspecte més glamurós de la lloada Creativitat.

La Cia. InCordis ha estat omplint el Teatre Gaudí de Barcelona d’encès jazz, dinamisme coral i un collage d’escenes dramàtiques que empenyien el seu públic cap a un Inframón tan expressiu com irregular.

 

El director Josep Galindo intenta teixiir un tapís humà complex amb els fils de nou personatges de neguit vital que lluita un cop i un altre contra l’autodestrucció: un camioner entossudit a convèncer la Nit que el seu fill copilot s’interposava entre ambdós. Una africana desertora que torna a la seva llar amb profunda amnèsia europea. Res en comparació amb el poderós banquer que pretén fer de la seva malaltia terminal el negoci de la seva vida. Tots tres són peces del mosaic dramatúrgic de Pablo Ley. El seu encaix a l’espectacle és forçat perquè el tauler manca d’unes coordenades definides més enllà de la seva declaració de principis: Per viure, hem d’estimar el nostre propi Infern.

I en aquesta proclamació festiva és on “EL VIATGE D’ORFEU” s’enlaira: Defensant-se de les paraules pretensioses i del pòsit mitològic que tendeixen a enterrar-los, respiren per l’escenari nou actors entusiastes, entregats i joiosos dins la seva irregularitat. Que arriben a encisar quan eleven les seves veus a l’elegant club musical creat per Jorge de la Torre (el sensual “Midnight” que la frescor de Yolanda Sey i la picardia de Maria Colom converteixen en delícia; la dolcesa d’Irene Gellida dins l’exuberància del seu vestit màgicament pop). Que fan del desdoblament dramàtic una eina valuosa d’entreteniment artístic: En fila índia i fent eco dels moments més íntims. I que experimenten amb un reguitzell d’històries difícils de compaginar però suggeridores quan l’autor les apunta amb insistencia: el periple a Brooklyn d’una turista suïcida inspirada per John Dos Passos i interpretada per una intel·ligent Aldara Ojeda; la celebrada descripció circenca de Joan Scufesis de la malaltia que pateix.

Preparats doncs per a la Salvació? No cal pensar-s’ho quan Orfeu toca la lira. Només ballar amb il·lusió sota terra…

 Per Juan Marea

EL VIATGE D’ORFEU s’ha representat al Teatre Gaudí de Barcelona fins al 19 d’abril.
http://teatregaudibarcelona.com/es/el-viatge-dorfeu/

Crítica teatral: Una giornata particolare, a la Biblioteca de Catalunya

Parlar dels muntatges de La Perla 29 és parlar d’èxit garantit, tant per la proposta acurada a què ens tenen acostumats com per la quantitat de seguidors fidels que, espectacle rere espectacle, esgoten les entrades allà on estrenin. I, com era d’esperar, Una giornata particolare no n’és una excepció: basada en la pel·lícula d’Ettore Scola de 1977 (amb Sophia Loren i Marcello Mastroianni en els papers protagonistes), aquesta giornata aconsegueix crear un clima íntim i subtil carregat d’emotivitat –en bona part gràcies a l’espai en què es representa, la Biblioteca de Catalunya– entre dues ànimes ferides i desemparades que troben consol l’un en l’altra durant aquest dia tan especial, el de la trobada entre Adolf Hitler i Benito Mussolini a Roma (6 de maig de 1938), un espectacle convertit ja en una recomanació obligada de la cartellera actual.

Oriol Broggi no pretén marcar una ruptura amb el film de Scola, i per això la funció que ell signa comença amb les primeres imatges de la pel·lícula, amb Sophia Loren llevant el seu marit i els seus fills per a que no facin tard a la desfilada militar en honor a Hitler. Un cop han marxat tots, Loren es pren un respir, i és en aquest precís instant quan apareix Clara Segura en escena, compartint amb el personatge del cel·luloide les seves primeres paraules fins que la imatge de la pel·lícula desapareix i comença, ara sí, aquest muntatge en què les mirades i els silencis són els veritables protagonistes.

Així, trobem a Antonietta, esposa abnegada i mare de sis fills, fent les labors domèstiques quan, per un fet fortuït, coneix el seu veí Gabriele. Sense que cap dels dos ho pugui preveure, es trobaran dues formes d’entendre el món: ell és un locutor de ràdio acomiadat de la feina per la seva homosexualitat i per les seves idees contràries al règim, mentre que ella sent una fascinació total per la figura d’Il Duce. Malgrat tot, aquest encontre farà que ell recuperi l’alegria d’estar viu i ella tornarà a sentir-se una dona –i no una invisible mestressa de casa com fins ara–, però confondrà els seus jocs i les ganes de fer-la riure –«Plorar ho pots fer sol, però per riure cal ser dos»– amb un desig que només serà imaginari, una situació delicada en què el públic exercirà d’espectador passiu amb una posició d’avantatge respecte a ella: sap els secrets que oculta Gabriele i que Antonietta ni tan sols sospita, i això fa que intueixi amb certa tristesa l’inevitable desengany final.

Una giornata particolare aconsegueix reflectir encertadament i amb senzillesa l’esperit d’aquella època, uns temps difícils en què el feixisme controlava amb mà ferma la societat i perseguia aquell que no estigués d’acord amb Mussolini i els seus, relegant la dona al paper de mestressa de casa al servei de marit i fills. En la Itàlia del moment no hi havia lloc per a Gabriele, per a qui «un home ha de ser marit, pare i soldat. I jo no sóc cap de les tres coses», fet que el porta al llindar de la desesperació més absoluta. Per a aquesta ocasió l’espai escènic de la Biblioteca de Catalunya s’ha dividit en dos àmbits, el pis d’ella i el pis d’ell, però amb quatre llençols es pot transformar en el terrat de l’edifici, moment en què l’espectacle viu una de les escenes més emotives de la funció, amb la confessió desesperada de Gabriele i la fulminant reacció d’Antonietta.

El secret, però, que fa d’aquesta una peça imprescindible ha estat la tria dels actors, amb Clara Segura i Pablo Derqui deixant-se la pell novament per a defensar, amb la seva habitual intensitat, els seus papers. En aquest sentit, Segura combina l’expressivitat de la seva mirada amb la tristesa que desprèn el seu somriure durant tota la funció, aconseguint que el seu personatge perdi la desconfiança del principi i es deixi anar, empesa per conclusions equivocades; per la seva banda, Derqui esprem la capacitat de Gabriele de jugar amb l’ambigüitat. A ells, i per a completar el repartiment, s’hi afegeix Màrcia Cisteró com la portera que adverteix Antonietta per a que no es deixi entabanar.

Una giornata particolare es representarà a la Biblioteca de Catalunya fins al 3 de maig de 2015.

Text: Ettore Scola, Ruggero Maccari
En col·laboració amb: Gigliola Fantoni
Direcció: Oriol Broggi
Traducció: Anna Madueño
Col·laboració en el text: Marc Artigau
Intèrprets: Clara Segura, Pablo Derqui, Màrcia Cisteró
Escenografia: Oriol Broggi
Il·luminació: Albert Faura
Disseny de so: Damien Bazin
Vestuari: Berta Riera
Disseny audiovisual: Francesc Isern
Caracterització: Àngels Salinas
Construcció d’escenografia: Taller d’escenografia Castells i Planas
Confecció de vestuari: Dress Art i Irene Fernández
Veu en off: Pasquale Bavaro
Assistent en pràctiques de l’IT: Melina Pereyra
Regidor: Marc Serra
Cap tècnic: Guillem Gelabert
Tècnic: Juan Boné
Atenció al públic i figuració: Lídia Figueras, Núria Ubiergo
Fotografia: David Ruano
Disseny gràfic: Pau Masaló
Una producció de: La Perla 29

Horaris: dimarts, dimecres, dijous i divendres a les 20:30 hores; dissabte a les 18:00 hores i a les 21:00 hores; i diumenge a les 18:00 hores
Preu: 27 €
Idioma: català
Durada: una hora i quaranta minuts

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Escrit per: Robert Martínez

Crítica: Maratón, de Richard A. Billows, editorial Ariel.

De todos es conocido que la cultura occidental le debe mucho al mundo antiguo, sobre todo a las civilizaciones griega y romana. De ahí que el conflicto que los primeros mantuvieron con los persas y que les insufló del vigor político y social para resplandecer durante los siglo V y IV a.C., sea un tema al que los historiadores hayan recurrido de una forma u otra para estudiar la conformación del estilo de vida griego en la Antigüedad.

Y en esta ocasión ha sido el historiador Richard A. Billows quien se ha aventurado a tratar de nuevo el tema, con una hipótesis de trabajo que queda muy clara en el título original del libro: Marathon, How One Battle Changed Western Civilization. O lo que es lo mismo, ¿fue la batalla de Maratón el hito militar que dio vida a la Grecia clásica que todos conocemos y que se convirtió en la base en la que se fundamenta la Civilización Occidental?

Para ello Billows nos presenta un libro de tan solo 282 páginas que se organiza en diversos apartados. El primero se centra en el desarrollo de la leyenda de Maratón a lo largo del tiempo hasta llegar a la creación de la prueba del maratón en los primeros Juegos Olímpico modernos. Una sección esta en la que el autor explica de forma sencilla y amena la mítica y la ficción que rodeó desde la Antigüedad la memoria de la batalla.

El segundo apartado es una introducción a la historia tanto de Grecia como del Imperio persa desde el siglo VII a.C. Esta sección si bien necesaria, sobre todo para aquellos lectores menos avezados en la temática, se hace excesivamente lenta y abarca no tan solo un desmesurado espacio de tiempo para presentar la batalla, sino que ocupa la mayor extensión del libro, nada menos que 104 páginas, por lo que este queda algo desequilibrado.

921056A esta sección le siguen los apartados que seguro más interesan al lector, que no son otros que la escalada de violencia entre griegos y persas y como no, el desarrollo de las hostilidades. Es en esta parte donde Billows analiza a fondo la cuestión: el ascenso de los persas, la conquista de los griegos de Asia Menor, la Revuelta jonia y los acontecimientos previos al enfrentamiento militar entre atenienses y persas. Tras ello el autor nos relata cómo y en qué circunstancias se produjo la batalla de Maratón. Hay que decir que si en el episodio introductorio el relato posee un estilo muy de «manual«, en esta sección, la de la propia batalla, el texto del autor alcanza su máxima tensión, y consigue narrarnos, casi minuto a minuto y desde una perspectiva ateniense, cómo se originó y desarrollo la batalla, de una forma muy accesible. Este es, por tanto, uno de los mejores relatos de una batalla antigua que he leído a nivel de difusión que consigue, además, enganchar al lector.

Para finalizar el libro el autor nos propone un ejercicio de historia-ficción: ¿Qué habría pasado si los persas hubieran vencido a los atenienses en esta batalla de Maratón? Un desarrollo interesante con el que se puede estar de acuerdo o no (ya se sabe que es difícil valorar lo que nunca ha pasado) y que nos permite entrever cuáles fueron las consecuencias del episodio militar narrado en el libro.

Billows demuestra, pues, ser un buen conocedor de la época, no por otra es especialista en el mundo mediterráneo antiguo y autor de obras como Kings and Colonists: Aspects of Macedonian Imperialism (1994), Antigonos the One-Eyed and the Creation of the Hellenistic State (1997), o Julio César. El coloso de Roma(Gredos, 2011). Sin embargo la traducción no está, en diversos momentos, a la altura de la obra, algo que puede afectar al esfuerzo de lectura de aquellos más sensibles al respecto. Si bien es cierto, que el estilo y la habilidad del autor al narrarnos los hechos históricos y militares que rodean a la batalla de Maratón, consiguen meter al lector en el tema, sobre todo en los capítulos que se centran en la batalla misma.

El libro incluye, además, mapas situacionales, una amplia cronología y glosario de términos que ayudarán al lector a situarse correctamente en la época y un amplio, también, índice analítico al que se suma una bibliografía extensa.

Maratón, el origen de la leyenda, de Richard A. Billows, es una excelente excusa para regresar a una batalla que, aunque cuando se la compara con Salamina y Termópilas puede parecer algo modesta, sin duda significó un hito en la historia de la libertad griega y por consiguiente, en la configuración de la Civilización Occidental.

Título: Maratón: El origen de la leyenda
Autor: Richard A. Billows
Editor: Editorial Ariel
Fecha de edición: 4 de marzo de 2014
Formato: Tapa blanda
Páginas: 288
Precio: 18,90 €

NOTA CULTURALIA: 7,5
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Jorge Pisa

Crítica teatral: Maldita fortuna, al Teatre Apolo

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¿Heu imaginat mai com serien les vostres vides si tinguéssiu una fortuna amagada en un paradís fiscal? O millor encara: ¿heu pensat com reaccionarien els vostres amics i coneguts si sospitessin que sou rics? Francis Veber (El sopar dels idiotes) deuria fabular alguna vegada amb aquestes idees, i el resultat d’aquest exercici imaginari és Maldita fortuna, la darrera comèdia d’embolics signada per l’escriptor francès que ara arriba al Teatre Apolo de la mà del tricicle Paco Mir, un veritable expert en arrencar rialles que dirigeix un repartiment excel·lent encapçalat per David Fernández, aquí convertit en un pocapena que tan sols aspira a deixar de ser invisible a ulls del seu entorn més proper. Crítica amb el model econòmic que premia les aparences i sense grans pretensions, Maldita fortuna garanteix una bona quantitat de rialles a tot aquell que accepti participar del joc que proposa: riure’s d’un mateix i de l’ésser cobdiciós que, qui més qui menys, tots amaguem al nostre interior.

Fart de ser permanentment ignorat per aquesta societat materialista, Agustín Morillo (Fernández), un aturat de llarga durada amb greus problemes econòmics, creu trobar la manera de sortir del pou forjant-se una falsa identitat, la d’home ric amb un enorme patrimoni amagat a l’estranger i perseguit per Hisenda. Així, i un cop ha convençut per a la seva causa l’inspector Ernesto Caravaca (Carles Gilabert, capaç de mostrar una gestualitat sinistra que esdevé perfecta pel personatge), s’inventarà una inspecció amb què posarà en evidència la part més mesquina d’aquells que l’envolten: la decoradora del pis que custodia (Anna Gras-Carreño), la seva ex (Susanna Garachana) i el banquer que fins aquell moment es negava a donar-li un cop de mà (Pep Miràs). Gairebé sense adonar-se, el joc de Morillo deixa de ser una fantasia pueril i, poc a poc, en va perdent el control al mateix temps que comprova espantat com aquells diners ficticis el converteixen en un estrany objecte de desig –«¿Es que todo el mundo esconde un monstruo?», es pregunta en veure les reaccions d’aquells que l’havien deixat de banda en el seu infern particular–. Per sort, trobarà refugi en la seva veïna, Olga (Marta Capel), amb qui no haurà de fingir ser aquell que no és.

D’aquesta manera, entre crítiques a la crisi econòmica actual i al qüestionable art contemporani i oportunes reflexions sobre el gènere humà i l’amistat real, l’obra avança encadenant gags més o menys encertats (els cara a cara entre Fernández i Gilabert són els millors moments d’aquesta primera part) fins a la irrupció de Víctor Blasco (sensacional Toni Sevilla en el paper d’un milionari despreocupat i un pèl barrut), el padrí de Morillo que torna per capgirar la situació i descol·locar tothom, personatges i espectadors. A partir d’aquest moment, Maldita fortuna aconsegueix redreçar el seu camí per conduir la història cap a un final no exempt d’ironia vers els principals protagonistes d’aquesta bona comèdia, una aposta segura si cerquem una proposta teatral amb què riure una estona.

Maldita fortuna es representarà al Teatre Apolo a partir del 16 de març de 2015.

Autor: Francis Veber
Direcció: Paco Mir
Intèrprets: David Fernández, Pep Miràs, Carles Gilabert, Susanna Garachana, Marta Capel, Toni Sevilla, Anna Gras-Carreño
Escenografia: Paula Bosch
Il·luminació: Eudald Gili
Vestuari: Carlota Ricart, Maria Albadalejo
Regidoria: Olalla Calvo
Productora: VANIA PRODUCCIONS

Horaris: dimecres, dijous i divendres a les 20:30 hores; dissabte a les 18:00 hores i a les 20:30 hores; i diumenge a les 18:00 hores
Preu: de 15 € a 28 €
Idioma: català i castellà
Durada: una hora i quaranta minuts

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Escrit per: Robert Martínez

Crítica teatral: El Lazarillo de Tormes, en el Teatre Condal

lazarillo_facebook3Como es bien sabido, los clásicos nunca abandonan del todo los escenarios de los teatros, regresando a ellos de forma cíclica debido al vigor de su contenido y a la realidad a la que hace referencia. Y si hay algún actor vinculado a la re-visitación de los clásicos, este no es otro que Rafael Álvarez El Brujo. Y si hay una obra vinculada especialmente con el actor, esta no es otra que El Lazarillo de Tormes, un clásico de la literatura española que celebra los 25 años de la versión teatral que Fernando Fernán Gómez realizó para El Brujo.

Una obra, la del Lazarillo, que sigue el esquema habitual de las obras que interpreta Rafael Álvarez, esto es, el trabajo en monólogo del autor que nos recita diversos episodios de la novela y que al mismo tiempo los analiza en el contexto de la época en la que fueron escritos y en su relación con la actualidad. Y no se nos puede escapar que las vivencias de un joven pícaro maltratado por la sociedad y resignado por el hambre tienen puntos de contacto con la actualidad, en la que y en la misma Cataluña, un asombro alto porcentaje de niños y niñas se ven afligidos por el hambre y la exclusión social.

La versión que Fernán Gómez realizó de la obra para El Brujo, nos presenta tres escenas de la novela entre las que destacan la relación, conocida por todos, de Lázaro con el ciego mendicante y la estancia que el joven pícaro sufre en la casa del religioso avaro. La obra no necesita para avanzar más que a El Brujo, por lo que la escenografía es nimia, compuesta tan solo por varias velas y por un mínimo de atrezo. El Brujo, además, se permite entrar y salir constantemente del personaje para hablar directamente al público, con el que establece un diálogo fluido y las más de las veces humorístico. En esta dualidad de la interpretación recae la estrategia de la representación, por lo que podremos ver dos personajes sobre el escenario: el Lazarillo que nos relata sus aventuras y El Brujo que analiza las peripecias del protagonista con un agudo sentido del humor. En algunos momentos, además, la representación se pausa para dar paso al actor, que nos hablará de su relación con el teatro, con la obra y con la vida misma.

slide02El Brujo domina a la perfección una obra que representa desde hace 25 años, que  forma parte de su propia sensibilidad y que le ha dado un lugar sobre los escenarios españoles. Todo está preparado en ella para hacer resplandecer ante los ojos de los espectadores tanto al personaje del Lazarillo como al actor que lo encarna, envuelto todo con el sentido del humor propio de la obra y del actor que le da vida.

Aunque esta no será la única obra que El Brujo interpretará sobre el escenario del Condal. Una vez finalizada las representaciones del Lazarillo de Tormes, se iniciarán el 29 de abril las representaciones de Mujeres de Shakespeare, una de las últimas creaciones de El Brujo que permitirá al público barcelonés observar la evolución teatral del actor a lo largo del tiempo, y en la que sin duda repetirá el formato de El Lazarillo y La Odisea, representada también en el Condal el año pasado.

El Lazarillo de Tormes nos permite disfrutar de una de las grandes novelas de la literatura española, de una pequeña joya del teatro contemporáneo español y de uno de los actores más carismáticos de la escena madrileña. ¿Qué más se puede pedir por el precio de una entrada de teatro?

«El Lazarillo de Tormes» se representa en el Teatre Condal del 8 al 26 de abril de 2015.

Versión: Fernando Fernán Gómez
Dirección: Rafael Álvarez, El Brujo
Reparto: Rafael Álvarez, El Brujo
Iluminación: Gerardo Malla
Vestuario: Lola La Moda
Espacio sonoro: Javier Alejano
Caracterización: José Antonio Sánchez
Producción: Producciones El Brujo

Horarios: de miércoles a viernes a las 20:00 horas; sábados a las 18:00 y a las 21:00 horas y domingos a las 18:00 horas
Precio: de 24 a 28 €
Idioma: castellano
Duración: 1 hora y 30 minutos

NOTA CULTURALIA: 8
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Jorge Pisa

“El capital humano” de Paolo Virzì: Il nostro caro Blake Carrington

El afán por medrar en el estatus social provoca víctimas de largo alcance. ¿Cómo se recupera el nuevo rico de un descalabro económico cuando no dispone de un alma que pueda volar sola? Pues sumiéndose en una confusión irreversible, en la que la falta de escrúpulos no cede fácilmente el protagonismo.

EL CAPITAL HUMANO (IL CAPITALE UMANO) es un producto cinematográfico anodino que camufla tras unos personajes amorales y una trama accidentada el empeño de conseguir una obra entretenida de sobremesa. En la película de Paolo Virzì no hay ningún atisbo de sinceridad y sí mucho de tomadura de pelo: La exposición de su historia resulta ramplona por la falta de matices en la presentación de los personajes (los dos cabezas de familia tropiezan de manera tosca en fotogramas funcionales). El desarrollo del guión es una acumulación de golpes de efecto sin poso alguno (por ejemplo, el relato inverosímil de la ambición desemedida de Dino, que se limita a una galería de secuencias en las que chilla, gesticula y harta Fabrizio Bentivoglio).

Tampoco los actores pueden lucirse a pesar de que sus figuras viajen por escenas de lo más variadas ya que sus trajes (esto es, los personajes con los que les toca vestirse) están fabricados sin gracia ni estilo: Valeria Bruni Tedeschi irrita nuevamente como pazguata llorona; Fabrizio Gifuni parece salido de un “remake” de “Dinastía” y Valeria Golino no es más que un holograma fílmico porque se ve y no se ve según las ganas del espectador de seguir su rastro en el metraje. Esto último sí que es una lástima: Ella es la única con indicios de una buena interpretación pero, al carecer su “Roberta” de relevancia, se echa a perder.

En resumidas cuentas, el guión de Virzì, Francesco Bruni y Francesco Piccolo es mediocre y no logra sacar provecho del batiburrillo de temas que apunta. Ni siquiera el múltiple enfoque en el punto de vista que da a entender el supuesto carácter de obra coral resulta convincente porque ninguno de los protagonistas en que se centra la película a cada tramo está tratado con un mínimo de rigor.

Lo que sí consigue, en cambio, la película es que sustituyamos por un par de horas la pantalla del televisor para ver en formato panorámico un “episodio de serie” con conflicto “actual” y resolución “satisfactoria”: Nada cambiará al final. Los buenos seguirán siendo los que más fortuna derrochan para pasmo y admiración de televidentes siervos.

Por Juan Marea

EL CAPITAL HUMANO se ha estrenado en España el 10 de abril de 2015.

 

Crítica: Arde Roma. La caída del emperador Nerón y su ciudad, Stephen Dando-Collins, ed. Ariel.

arde-romaExisten algunos episodios de la historia que por su importancia y trascendencia, no solo han pasado a la posteridad sino que, por una razón u otra, son conocidos por la mayoría. Es habitual en estos casos que lo que se sabe de estos hechos sea tópico y común, y que su pervivencia a lo largo del tiempo haya favorecido la transmisión de toda una serie de equívocos potenciados por la literatura y, sobre todo en los últimos tiempos, por el cine y la televisión. Y si hay un caso de estos en la historia de Roma, no es otro que el del gobierno de Nerón y el incendio que sufrió la ciudad de Roma en el año 64 d.C. Por ello es importante la publicación de libros como Arde Roma, de Stephen Dando-Collins, editado por Ariel, cuyo objetivo es proveer de una mayor luz científica al acontecimiento y construir, a partir de tópicos y típicos, una visión histórica del acontecimiento.

El libro de Dando-Collins comienza con el relato de la fabricación de la “leyenda negra” sobre el incendio de Roma, y de como la historiografía, tanto la antigua como la moderna, ha desarrollado el relato de la tragedia centrándose en las acusaciones que se han ido sumado sobre la figura de Nerón. Para ello el autor da paso al relato histórico comenzando su narración con el inicio del reinado de Nerón, mostrándonos de esta forma las etapas de su gobierno y la Roma previa al gran incendio. Es en este apartado donde podremos ser conscientes de las circunstancias que llevaron al incendio y a la culpabilización de Nerón.

Tras ello Dando-Collins nos relata cómo se desarrolla el incendio, cuyas causas principales en ningún momento apuntan a Nerón. El relato histórico que hace el autor nos permite conocer cómo se sucedieron los acontecimientos, siempre desde el punto de vista de las fuentes antiguas como Suetonio, Tácito o Dion Casio, algunos de los cuales vivieron de cerca el trágico incendio. Es en este apartado donde el ardor se apodera del lápiz del autor y la narración se convierte más en un relato novelado, siempre, como he dicho antes, fiel a los textos históricos existentes. Y es, asimismo, donde podemos evidenciar la escasa relación que Nerón tuvo con el incendio, en un momento en el que el emperador estaba ausente de la ciudad.

Stephen Dando-Collins
Stephen Dando-Collins

Tras la narración del incendio Dando-Collins nos relata las consecuencias del mismo y el periodo de persecuciones que caracterizó la etapa final del reinado de Nerón, haciéndonos partícipes de la serie de ajusticiamientos que este llevó a cabo preso del miedo a una conjura contra su persona. El libro finaliza analizando la conspiración que puso final al reinado de Nerón en el 68 d.C. y que dio paso al año de los cuatro emperadores (esto es, el año en el que gobernaron sucesivamente Galba, Otón, Vitelio y Vespasiano) y a la instauración de la dinastía Flavia en Roma.

Arde Roma es uno de esos ejercicios de lectura que pretenden poner los puntos sobre las íes en lo que respecta a la historia, y más en episodios tan conocidos por el público y por ello, normalmente, tan alejados de lo realmente acontecido. Aunque el título parece indicar un interés especial por parte del autor en el incendio de Roma del año 64, el libro es más una biografía de Nerón que le dedica un amplio capítulo a la catástrofe y a las consecuencias de la misma.

Como elemento a destacar cabe indicar las páginas que dedica Dando-Collins a relatarnos la llegada y la coronación que Tiridates, el rey parto de Armenia, recibió de manos de Nerón en Roma en el año 66 d.C., una anécdota que, aunque interesante, normalmente no ocupa demasiadas líneas en las obras que tratan sobre la época. El autor, además, se recrea en la política del momento y en el carácter y los gustos de Nerón, sobre todo su inclinación por las artes escénicas (de carácter griego), algo que como os podéis imaginar no fue bien visto por todos en la época, y mucho menos por la aristocracia romana. Asimismo, se ha de felicitar al autor y al traductor porqué el libro está bien narrado y bien traducido, algo que, y esto es preocupante, no es algo tan habitual como debiera.

Arde Roma es un libro pequeño, 315 páginas, pero en él reside la fuerza de aquellos empeños que pretenden aclarar las cosas para el gran público. Si a su intención le sumamos el buen hacer del autor, un esfuerzo de documentación que se nota importante y el interés que puede generar un acontecimiento y un personaje como los que trata el libro, Arde Roma se convierte en una oportunidad de descubrir de forma amena y agradable lo cierto de la historia que se nos explica, y aprovechar para derribar los tópicos que no hacen nada más que enturbiar el conocimiento histórico.

Título: Arde Roma: La caída del emperador Nerón y su ciudad
Autor: Stephen Dando-Collins
Traductor: Ana Herrera Ferrer
Edirorial: Ariel
Fecha de publicación: 01/03/2012
Nº de páginas: 328
Idioma: Español
Formato: 14,4 x 23 cm.
Presentación: Rústica con solapas
ISBN: 978-84-344-7057-6
Precio: 21,90 €

NOTA CULTURALIA: 8

Jorge Pisa