Archivo de la etiqueta: Vania Produccions

Crítica teatro: Decadència, en la Sala Atrium

Vivimos en un mundo donde se impone poco a poco la ideología ultraconservadora, que nos propone una existencia a diferentes niveles, esto es, los ricos derrochando su patrimonio y contribuyendo socialmente lo menos posible y los no tan ricos cada vez con mayores problemas para llegar a final de mes. No es de extrañar, pues, que el teatro nos proponga material escénico al respecto para impulsar un debate artístico y social. Es en este contexto en el que se estrena en la Sala Atrium Decandència, de Steven Berkoff, una crítica a las clases altas y su forma de vida dirigida por Glòria Balañà i Altimira e interpretada por Carles Martínez y Míriam Alamany.

“Una pareja de amantes ricos vive en un estado de éxtasis permanente, consumiendo ópera, langostas, caviar, alcohol y sexo sin cesar. Cuando no hay fiestas, se aburren y cazan por distraerse, por pasar los domingos, por descansar del sexo sin dejar el placer y la excitación que les proporciona la caza. No hay nada más en el mundo. No importa más que su paraíso y sus presas. Helen y Steve viven su romance hasta el final y el obstáculo que podría destruirlos, encarnado en los patéticos Sybil y Les, no puede con ellos. Una vez más, el triunfo decadente de la clase acomodada, el triunfo del dinero y del poder.”

Decadència es un retrato crítico de la actual evolución social, política y económica mundial, que se centra en la vida ociosa y libertina de un par de parejas de clase alta. Glòria Balañà i Altimira ha querido mostrarnos su día a día, en el que el placer y los excesos están presentes, junto con un desprecio amplio y profundo de las clases sociales inferiores.

Decadencia_Sala Atrium

Martínez y Alamany dan vida, así, a diversos personajes nauseabundos aunque de forma admirable, con la dificultad añadida, en este caso, de la recitación de un texto en verso, una obra de ingeniería poética elaborada por Neus Bonilla y Carme Camacho, que sirve de contrapunto a la decadente acción que se desarrolla sobre el escenario: personajes que han perdido el sentido de la vida y que solo se mueven por el placer que les puede proporcionar su estatus social y económico.

La escenografía es mínima, reducida a un enorme “cuadro digital” que preside el espacio y un sillón, que hacen fijar la atención del público tan solo en la interpretación de los actores. Una delicia observar tan de cerca la placenteras vicisitudes de los personajes dominados por la buena comida, el alcohol, la ópera y el sexo, todo ello en diverso orden e intensidad. El vestuario y el maquillaje de los actores ayudan, también, a crear ese ambiente de decadencia que la obra intenta transmitir y que la proximidad con el público la hace, incluso, sentir.

Decadència nos permite, así, reflexionar sobre nuestra sociedad próxima, ya, a mediados del siglo XXI, y aunque fabricada con bastantes tópicos sobre el dispendio de la riqueza, nos puede ayudar a entender cómo evolucionamos política, social y económicamente, y cómo las ansias de riqueza y de poder, pueden afectar al planeta en el que vivimos, si no ponemos un poco de sentido común en nuestras vidas, ya sea la de los que lo tienen todo o la de los que se esfuerzan por tener algo, aunque solo sea un poco de dignidad.

“Decadència” se representa en la Sala Atrium del 1 al 27 de julio de 2025.

Autor: Steven Berkoff
Dirección: Glòria Balañà i Altimira
Traducción: Neus Bonilla y Carme Camacho
Intérpretes: Carles Martínez y Míriam Alamany
Espacio escénico: Alfonso Ferri
Iluminación: Sylvia Kuchinow
Sonido: Àlex Polls
Producción: Festival GREC, Vania Produccions y Atrium Produccions

Horarios: de miércoles a sábado a las 20:00 horas y domingos a las 18:30 horas
Precio: 22€ (entrada general)
Idioma: catalán
Duración: 75 minutos
NOTA CULTURALIA: 8
——

Jorge Pisa

Crítica teatro: El sopar dels idiotes, en el Teatre Borràs

Regresa a los escenarios barceloneses el clásico El sopar dels idiotes, una comedia alocada sobre el idiotismo y las consecuencias de ser idiota, versionada por Paco Mir, dirigida por Pep Anton Gómez e interpretada por David Olivares y Artur Busquets.

«El sopar dels idiotes narra la historia de un ejecutivo que suele cenar semanalmente con amigos –todos ellos hombres de negocios– y un invitado muy particular: un idiota. En esta ocasión, el invitado es un funcionario de hacienda con una obsesión por las maquetas gigantescas de edificios famosos hechos con cerillas y que él mismo construye. La historia se complica cuando, horas antes de la cena, el ejecutivo sufre un ataque de lumbago y el invitado se presenta en su casa. El inicio seguro de toda una serie de desastres…»

Grup Balañá recupera una de aquellas comedias que desde 1993 ha cosechado gran éxito en todo el mundo. En ella el público se verá asediado por las continuas situaciones cómicas y disparates provocados por un idiota cuando campa a sus anchas. Calamidad tras calamidad provocadas por la vanida de un editor, David Olivares, que se reúne cada semana con sus amigos en un concurso a ver quien trae al idiota más idiota, en este caso Artur Busquets. El karma ocasionará que el tiro le salga por la culata al interactuar su idiota con familiares y amigos en su propia casa.

El reparto del El sopar dels idiotes tiene el acierto de escoger a dos actores principales como David Olivares y Artur Busquets. Ambos se meten fácilmente en sus personajes para ofrecer el primer plato cómico de la función. Junto a ellos están Anna Gras-Carreño, Toni González y Ariana Bruguera. Especial atención al personaje interpretado por Jordi Vidal Gómez, el compañero de trabajo del idiota, que ofrecerá alguno de los momentos más hilarantes de la representación.

Y el resto ya os lo podéis imaginar: un escenario que nos muestra el salón donde se desarrollará toda la acción; personajes que entran y salen de escena afectados de alguna forma por los efectos de la idiotez humana y las continuas risas provocadas en el público.

Aunque la adaptación de Paco Mir actualiza en parte la representación, haciéndonosla más cercana, la dirección de Pep Anton Gómez no acaba de ser todo lo punzante que debería, esto es, a la representación le acaba faltando algo del ritmo que la trama cómica requiere, algo que en parte es subsanado con la vis cómica del reparto.

El sopar dels idiotes es, sin embargo, una oportunidad para reírse, y para hacerlo de un idiota, aunque, y este es uno de los puntos fuertes de la obra, a veces no sepamos bien bien quien es verdaderamente el idiota de la representación.

«El sopar dels idiotes» se representa en el Teatro Borràs del 20 de enero al 27 de febrero de 2022.

Autor: Francis Veber
Adaptación: Paco Mir
Dirección: Pep Anton Gómez
Reparto: David Olivares, Artur Busquets, Anna Gras-Carreño, Toni González, Jordi Vidal Gómez, Ariana Bruguera
Escenografía: Joan Jorba
Iluminación: Eudald Gili
Vestuario: Júlia López i Melià
Producción: Vània Produccions

Horarios: de miércols a viernes a las 20:00 horas; sábados a las 17:00 y a las 20:00 horas y domingos a las 17:00 horas
Precio: Web Grup Balañá
Duración: 100 minutos
Idioma: Catalán
NOTA CULTURALIA: 7
——

Jorge Pisa

Crítica teatral: Maldita fortuna, al Teatre Apolo

Maldita_fortuna

¿Heu imaginat mai com serien les vostres vides si tinguéssiu una fortuna amagada en un paradís fiscal? O millor encara: ¿heu pensat com reaccionarien els vostres amics i coneguts si sospitessin que sou rics? Francis Veber (El sopar dels idiotes) deuria fabular alguna vegada amb aquestes idees, i el resultat d’aquest exercici imaginari és Maldita fortuna, la darrera comèdia d’embolics signada per l’escriptor francès que ara arriba al Teatre Apolo de la mà del tricicle Paco Mir, un veritable expert en arrencar rialles que dirigeix un repartiment excel·lent encapçalat per David Fernández, aquí convertit en un pocapena que tan sols aspira a deixar de ser invisible a ulls del seu entorn més proper. Crítica amb el model econòmic que premia les aparences i sense grans pretensions, Maldita fortuna garanteix una bona quantitat de rialles a tot aquell que accepti participar del joc que proposa: riure’s d’un mateix i de l’ésser cobdiciós que, qui més qui menys, tots amaguem al nostre interior.

Fart de ser permanentment ignorat per aquesta societat materialista, Agustín Morillo (Fernández), un aturat de llarga durada amb greus problemes econòmics, creu trobar la manera de sortir del pou forjant-se una falsa identitat, la d’home ric amb un enorme patrimoni amagat a l’estranger i perseguit per Hisenda. Així, i un cop ha convençut per a la seva causa l’inspector Ernesto Caravaca (Carles Gilabert, capaç de mostrar una gestualitat sinistra que esdevé perfecta pel personatge), s’inventarà una inspecció amb què posarà en evidència la part més mesquina d’aquells que l’envolten: la decoradora del pis que custodia (Anna Gras-Carreño), la seva ex (Susanna Garachana) i el banquer que fins aquell moment es negava a donar-li un cop de mà (Pep Miràs). Gairebé sense adonar-se, el joc de Morillo deixa de ser una fantasia pueril i, poc a poc, en va perdent el control al mateix temps que comprova espantat com aquells diners ficticis el converteixen en un estrany objecte de desig –«¿Es que todo el mundo esconde un monstruo?», es pregunta en veure les reaccions d’aquells que l’havien deixat de banda en el seu infern particular–. Per sort, trobarà refugi en la seva veïna, Olga (Marta Capel), amb qui no haurà de fingir ser aquell que no és.

D’aquesta manera, entre crítiques a la crisi econòmica actual i al qüestionable art contemporani i oportunes reflexions sobre el gènere humà i l’amistat real, l’obra avança encadenant gags més o menys encertats (els cara a cara entre Fernández i Gilabert són els millors moments d’aquesta primera part) fins a la irrupció de Víctor Blasco (sensacional Toni Sevilla en el paper d’un milionari despreocupat i un pèl barrut), el padrí de Morillo que torna per capgirar la situació i descol·locar tothom, personatges i espectadors. A partir d’aquest moment, Maldita fortuna aconsegueix redreçar el seu camí per conduir la història cap a un final no exempt d’ironia vers els principals protagonistes d’aquesta bona comèdia, una aposta segura si cerquem una proposta teatral amb què riure una estona.

Maldita fortuna es representarà al Teatre Apolo a partir del 16 de març de 2015.

Autor: Francis Veber
Direcció: Paco Mir
Intèrprets: David Fernández, Pep Miràs, Carles Gilabert, Susanna Garachana, Marta Capel, Toni Sevilla, Anna Gras-Carreño
Escenografia: Paula Bosch
Il·luminació: Eudald Gili
Vestuari: Carlota Ricart, Maria Albadalejo
Regidoria: Olalla Calvo
Productora: VANIA PRODUCCIONS

Horaris: dimecres, dijous i divendres a les 20:30 hores; dissabte a les 18:00 hores i a les 20:30 hores; i diumenge a les 18:00 hores
Preu: de 15 € a 28 €
Idioma: català i castellà
Durada: una hora i quaranta minuts

____________________
Escrit per: Robert Martínez

Crítica teatral: Animals de companyia, al Club Capitol

Animals de companyia_00

Ningú va dir que el camí per a un dramaturg incipient seria fàcil, ni molt menys. Estel Solé podria escriure tot un tractat sobre les traves amb què el circuit de teatres convencional va rebre la seva primera proposta teatral; ella, però, lluny de caure en el desànim més absolut, va cercar una solució per a estrenar aquell text que havia modelat conjuntament amb els seus amics/actors, i va trobar en Bárbara Aurell la millor còmplice: ella li va oferir el menjador de casa seva com a escenari improvisat per a la primera representació d’Animals de companyia, un primer èxit al qual van seguir les actuacions en més de setanta pisos arreu de Catalunya i una gira per Centreamèrica, el rodatge perfecte abans del gran premi, l’estrena al Club Capitol, un merescudíssim reconeixement per a aquesta falsa comèdia sobre l’amistat i la solitud que el públic barceloní ha rebut amb entusiasme, exhaurint les entrades en diverses ocasions i convertint-la en una recomanació obligada.

La fórmula de Solé sembla senzilla: un grup d’amics organitzen un sopar amb què celebrar el retorn a casa de la Bet, una jove que ha passat els dos darrers mesos en un centre psiquiàtric. Les bones intencions amb què ultimen els preparatius de la vetllada quedaran sacsejades per la necessitat d’arribar a un acord per a mantenir la mentida –aparentment innocent– amb la qual un dels nois fa setmanes que oculta la realitat a la noia. Sostenir l’engany no serà una empresa fàcil, els quatre amics tindran problemes per a posar-se d’acord en la versió que explicaran, així que serà qüestió de temps que el sopar prengui una deriva terrible i difícil de solucionar, just a mesura que la nit avanci i l’alcohol, inevitablement, comenci a fer estralls en cadascun d’ells.

El plantejament inicial de l’obra pot recordar, en certa manera, el film Petites mentides sense importància, però el cert és que aviat Animals de companyia pren el seu propi camí: comença com una comèdia d’embolics, a estones un vodevil histèric més o menys clàssic, però és en la segona meitat de la funció, amb els primers retrets, quan l’obra es transforma en un notable drama carregat de veritat en què s’evidencia la dificultat per conservar l’amistat quan la sinceritat esdevé un instrument terriblement feridor i que destapa l’egoisme amb el qual sovint tractem els nostres amics, al mateix temps que comprovem que, en el fons, tan sols som animals desemparats que necessitem afecte urgentment. D’altra banda, la trama també posa de manifest que no és fàcil acceptar que mai serem aquell que un dia vam somiar i que els dubtes, inherents en molts de nosaltres, són mals companys de viatge: sovint donem massa voltes per arribar a un lloc i en el trajecte perdem un temps preciós que, per desgràcia, mai recuperarem.

A més, un dels grans encerts d’Animals de companyia el trobem en el seu procés de creació, en què van participar els actors conjuntament amb l’autora de la peça. Aquesta característica potencia la naturalitat amb què cada intèrpret defensa les seves rèpliques, amb un valuós repartiment on trobem Miriam Tortosa, Martina Tresserra i Jacob Torres, però és de justícia destacar la feina d’Eduard Buch i Mercè Martínez, dos grans actors que capten bona part de les mirades dels espectadors: ell en la seva faceta més còmica, amb un memorable monòleg, un discurs marcat per l’alcohol tan divertit com vigorós i en què intuirem com seria la seva vida si tingués tot el valor de què va mancat; per la seva part, ella protagonitza la vessant més dramàtica de l’obra, esplèndida en la seva fragilitat, quan és incapaç de reprimir el plor en adonar-se del poc interès que els seus suposats amics mostren vers ella i els seus sentiments.

Animals de companyia es representarà al Club Capitol fins al 15 de març de 2015.

Autora: Estel Solé
Direcció: Estel Solé
Intèrprets: Eduard Buch, Miriam Tortosa, Martina Tresserra, Jacob Torres, Mercè Martínez
Escenografia: Ramon B. Ivars
Ajudant d’escenografia: Macià Garcias
Il·luminació i so: Bernat Treserra
Vestuari: Maria Armengol
Il·lustració i tipografia: Paula Bonet
Fotografia: Lita Bosch
Assistent fotografia: Berta Vicente
Producció: Carles Roca, Olalla Calvo
Assistent de producció: Violeta Borrell
Construcció d’escenografia: Ricardo Alcaide
Regidoria: Clàudia Flores
Tècnic teatre: Alfons Mas
Disseny gràfic: Eduard Buch
Administració: Teresa Gómez
Premsa: Marta Solé
Distribució: Vania Produccions

Horaris: dimecres, dijous i divendres a les 20:00 hores; dissabte a les 17:30 hores i a les 20:00 hores; i diumenge a les 17:30 hores
Preu: de 17 € a 21 €
Idioma: català
Durada: 1 hora i quinze minuts

____________________
Escrit per: Robert Martínez