En 1969, 30 años después de acabar la Guerra Civil, se editó el cómic Soldado invicto. Era una biografía adulterada, laudatoria y maniquea de la vida del dictador. Ahora, que se cumplen los 50 años de su muerte, se publica Franco de Paul Preston en la que el rigor histórico entra en escena. El historiador se ha vuelto a unir al dibujante José Pablo García para continuar con la fórmula que les llevó a los éxitos de ventas con La guerra civil española y La muerte de Guernica. Ian Gibson y Quique Palomo hicieron lo propio con Vida y muerte de Federico García Lorca, Ligero de equipaje. Vida de Antonio Machado y Cuatro poetas en guerra. Se repite el esquema: hispanistas anglosajones consagrados que se acercan a ilustradores españoles para contar distintos episodios de la Guerra Civil.
En el caso de Franco es un libro de historia con apariencia de cómic. La obra no funciona como novela gráfica ya que el peso de la narración se lo lleva el texto y no la imagen. Aquí el dibujo es un mero soporte y hay un abuso del empleo de las cartelas donde se cuela toda la narración. Se utilizan los mismos recursos estéticos que en obras anteriores. Con una paleta de colores pardos se representa la vida monócroma bajo la dictadura. Con ese color terroso se cae en la tentación fácil de hacer duplicados de fotos históricas a viñetas como por ejemplo el encuentro con Hitler o la célebre pancarta del No pasarán en la calle Toledo.
El texto nos resume de manera concisa la vida de Franco sin centrarse en meros acontecimientos de la alta política y haciendo hincapié en aspectos psicológicos. Se tratan temas como el bochorno que sentía por su padre o la incómoda relación con su hermano Ramón. Se muestran los ingredientes para entender cómo se construye el personaje mezquino, cauteloso y resentido.
De una manera panorámica vemos una vida rodeada de muertes accidentales, varias de ellas en accidentes de avión, que de alguna manera le beneficiaban. Testimonio de ello son la desaparición de los generales Balmes, Mola, Sanjurjo y de su propio hermano. En relación a esto también se ilumina la capacidad para deshacerse de sus posibles competidores como Fal Conde, Gil Robles, Juan de Borbón o el mismo José Antonio Primo de Rivera. Parece que Franco tenía la baraka y sus enemigos no le podían hacer daño. Él tuvo el poder de sobrevivir a todos.
Preston también nos da las claves para entender la brutalidad de los militares africanistas, su despiadada participación en la represión de las huelgas del 17 y del 34 y su capacidad de concebir la guerra de manera mediática; muestra de ello fue la toma del Alcázar de Toledo en la que obligó, al día siguiente de su caída, que las cámaras lo filmasen merodeando entre los escombros.
El cómic acaba con la imagen del Valle de los Caídos. Por desgracia, Madrid no fue la tumba del fascismo y sí se convirtió en la tumba del dictador. La exhumación del cadáver, su traslado a Mingorrubio y la polémica que suscitó requieren de un epílogo
Título: Franco Autores: ● Texto: Paul Preston ● Dibujo: José Pablo García Editorial: Debate Fecha publicación: noviembre de 2024 Páginas: 192 Precio: ● Tapa dura: 21,75€ ● eBook: 10,44€
En Nexus, Harari contempla a la humanidad desde la amplia perspectiva de la historia para analizar cómo las redes de información han hecho y deshecho nuestro mundo. Durante los últimos 100.000 años, los sapiens hemos acumulado un enorme poder. Pero, a pesar de todos los descubrimientos, inventos y conquistas, ahora nos enfrentamos a una crisis existencial: el mundo está al borde del colapso ecológico, abunda la desinformación y nos precipitamos hacia la era de la I.A. Con todo el camino andando, ¿por qué somos una especie autodestructiva?
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Francisco José Cámara González Francisco Plaza Gil
Culturalia en colaboración con entradasymás te ofrece 2 entradas dobles para asistir a la representación de “Debate” en LosTeatros del Canal (Madrid).
Te invitamos el próximo martes 3 de mayo a la representación de la obra Debate en Los Teatros del Canal (Madrid) a las 20:00 horas.
«Debate presenta una visión de cómo se gobierna nuestro país, de cómo se nos hurta la participación. Toni Cantó regresa al teatro como autor y director compartiendo con el público la privilegiada mirilla que desde su escaño le ha descubierto las entrañas del juego político español, entrevistando a periodistas, políticos y realizadores de televisión que formaron parte de los debates más importantes de la historia de nuestra democracia.
El resultado en escena es una ácida, cómica y descarnada visión de cómo se gobierna realmente este país. No siempre se celebran debates y, cuando se hace, es a regañadientes, se limita quiénes participan y el formato es tan rígido que no acaba de cumplir con su función. En Debate, los número dos del partido azul y del rojo negocian los dos debates que se televisarán. Una periodista participa en algunas de esas negociaciones».
Enviar un mail a concurso_culturalia@hotmail.es antes del lunes 2 de mayo a las 20:00 horas. En el asunto del mensaje has de indicar Concurso Debate y en el correo has de indicarnos tu nombre completo y tu número de móvil.
De esta forma podrás participar en el sorteo de 2 entradas dobles para asistir a la representación de“Debate” enLos Teatros del Canalde Madrid el próximo 3 de mayo a las 20:00 horas.
“El nombre de los ganadores aparecerá publicado en nuestro blog”
Cuando uno hace una crítica teatral siempre tiende a considerar, aunque a veces la tarea sea harto complicada, la contemporaneidad de la obra que se somete a su examen. De ahí que hasta la performance más exótica o el aquelarre teatral más acrobático sean analizados y explicados en clave de actualidad.
Pues bien, con Pàtria, la obra dirigida por Jordi Casanovas y estrenada el pasado 18 de octubre en el Teatre Lliure de Gràcia, todo esto que les acabo de explicar no es necesario. No es que el propósito de la obra no se deba llevar a la actualidad, sino que, por el contrario, la actualidad que vivimos hoy mismo ha sido trasplantada sobre el escenario del Lliure, lo que convierte en algo fútil el intento del reseñador.
Pàtria nos invita a una reflexión sobre la situación política que vive Cataluña y España en la actualidad. Todo comienza con la noticia de la muerte de la madre de Miquel Raventós, presentador de televisión y moderador del debate político previo a las elecciones autonómicas catalanas. Las últimas palabras de la madre de Miquel lo dejan afligido y bajo de defensas ante las falacias y las mentiras de los representantes políticos, lo que le obliga a expresar claramente su opinión sobre la situación del país ante las pantallas y a hacer pública su proclama: Bona Nit y Llibertat!
Las afirmaciones manifestadas por Raventós en directo asombran a conocidos y familiares y conectan espontáneamente con una sociedad necesitada de argumentos e ideas auténticas que seguir y que la saquen de la grave situación de crisis económica, política y moral en la que vive. La aparición de una ambiciosa asesora de campaña política (Rosa Vila), hará decidirse al periodista a pasar al mundo de la política con un programa y una propuesta rupturista: la independencia de Catalunya.
Casanovas nos presenta, en el segundo capítulo de su trilogía sobre la realidad catalana inaugurada el año pasado con Una història catalana, un juego poliédrico de verdades y mentiras en el que aparecen todos los temas que, seguro, discutimos en familia, entre amigos o en los descansos en la oficina: la mentira engañosa de los políticos; los intereses económicos ocultos tras las siglas de los partidos políticos; la acción oscura y poco ética de los grandes grupos financieros y las corporaciones multinacionales; la utilización por parte de los políticos de proclamas y slogans más o menos fraudulentos para conseguir más votos, el desgastado y mezquino, a veces, papel de la prensa…
Lo que nos propone Casanovas es una reflexión sobre la realidad política, económica y social en la que vivimos inmersos, justo en un momento en el que el debate sobre la complicada relación entre España y Cataluña está más presente y en un panorama en el que parecen consolidadas las propuestas rupturistas, como las imaginadas en Pàtria. En medio de esta vorágine de voluntades y atrevimientos, Casanovas nos viene a confirmar una cosa importante: hasta las verdades políticas están basadas en la mentira.
La trama de Pàtria se fabrica en el escenario a partir de la labor de seis actores que irán mutando de apariencia y de personalidad para narrarnos una historia de ambición y de renovación política. Francesc Orella está magnifico, como de costumbre, en su papel de candidato capaz, por primera vez en la historia, de conseguir el poder en Cataluña como líder de una fuerza política independentista. Su contrincante principal, Alex Casanovas, traza firmemente un personaje antiestético, el de un político capaz de cualquier acto o traición que le permita mantenerse en el poder y mejorar la intención de voto de su partido. Aquí se halla, pues, la base del enfrentamiento teatral de la obra: la pugna entre el intento honesto de hacer política, que, como no podía ser de otra forma, proviene de fuera del mundo de la política y el empeño de las clases gobernantes, corruptas y ambiciosas, de mantenerse en el poder y conservar sus privilegios cueste lo que cueste. ¿Les suena esto de algo?
Este desafío teatral entre Orella y Casanovas, el actor, se acaba de construir gracias a la interpretación del resto del reparto, en el que Marcel Borràs, Lluïsa Castell, Fermí Reixach i Rosa Vila tejen con sus actuaciones una tela de araña interpretativa resistente y flexible, sin la cual la trama de la obra no podría avanzar, y menos de una forma tan convincente.
Pero Casanovas, el director, va más allá de la mera transposición de la actualidad al escenario, y pretende analizar, bajo el formato de una obra de trasfondo político y social, la realidad que subyace tras los símbolos, esos con los que se juega siempre, y que se convierten en sólidos referentes no solo de ideas sino también de acciones. Símbolos como Moragues, Macià o Companys, a los que podríamos sumar El Cid o los Reyes Católicos en España (la Patria a la que hace referencia el título de la obra) y que las más de las veces, por no decir siempre, están construidos artificiosamente sobre verdades a medias, pero que sirven muy bien para movilizar, en base a la emoción y los sentimientos «de tripa», a las personas y a las comunidades en función de intereses invariablemente particulares.
Este es el meollo, a mi parecer, de lo que quiere tratar Casanovas, y para ello construye una trama interesante, actual y con ritmo, en la que la vida repleta de mentiras se enfrenta a la verdad, materializada en el síndrome de Asperger que sufre Marcel Borràs, el hijo de Raventós, que le impide mentir. Un tipo de autismo que se puede considerar como una enfermedad o como una bendición, dependiendo del punto de vista des del que se mire. Y a Casanovas le interesa dejar su opinión en suspenso, para generar un debate ligado al juego político, que no podría sobrevivir sin la mentira y donde el verdadero autista es aquel que dice la verdad.
Casanovas nos propone una reto interesante sobre la realidad más cercana, aquella que inunda nuestro día a día y aquella que habla sobre la veracidad de nuestros referentes históricos y culturales. Por medio nos quiere hacer reflexionar sobre nosotros mismos. ¿Son las mentiras y la perfidia de los políticos un síntoma de una clase corrupta y amoral, o sus defectos son los mismos que sufrimos nosotros? ¿Los políticos están hechos de la misma pasta que la sociedad? Yo por desgracia me decanto por esta última opción, y suelo pensar que los problemas que sufrimos como sociedad, como país, como cultura y si me fuerzan incluso como humanidad, se deben a que, como personas, nos dejamos llevar habitualmente por nuestros intereses más privativos. Un combustible este, que por desgracia ha hecho mover, mueve y moverá durante mucho tiempo, puede incluso que de forma indefinida, el destino del planeta y de las sociedades que en él se desarrollen.
“Pàtria” se representa en el Teatre Lliure Gràcia del 18 de octubre al 11 de noviembre de 2012.
Pàtria prolonga su temporada en Barcelona en el teatre Poliorama hasta el 16 de diciembre de 2012.
Dramaturgia y dirección: Jordi Casanovas
Reparto: Marcel Borràs, Àlex Casanovas, Lluïsa Castell, Francesc Orella, Fermí Reixach y Rosa Vila
Escenografía: Jordi Soler Prim
Vestuario: Albert Pascual
Caracterización: Lucho Soriano y Mariona Trias
Iluminación: David Bofarull (a.a.i.)
Sonido: Damien Bazin
Producción: Teatre Lliure y EL CANAL – Centre d’Arts Escèniques Salt/Girona
Horarios: de martes a viernes a las 20:30 horas; sábados a las 21:00 horas y domingos a las 18:00 horas. Precio: 30,25 €; miércoles, día del espectador 21,30 €; 25,75€ con descuento Idioma: catalán Duración de la obra: 2 horas sin pausa
Espectáculo recomendado por el Servei Educatiu del Teatre Lliure
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