El Dia de la Mare no vaig fer cap regal a la meva. Ella m’ho va agrair preparant-me el meu plat favorit. Sí, ho sé: No sóc un bon fill. I com que no vaig tenir prou amb aquesta evidència, vaig anar al Teatre Condal a veure com quatre actrius i un actor desfilaven al llarg de gairebé hora i mitja exhibint a l’escenari amb generositat i encert un catàleg complet de mares prototípiques. Fins i tot, alguna d’excepcional. Al final de la funció, em vaig sentir encara més culpable: Jo hi sortia retratat. Però novament la intel·ligència genètica femenina em va revelar el camí: Ara tampoc no es tractava d’acaparar cap protagonisme de part d’elles. No. En aquest cas, l’objectiu era demostrar-me que aquests dies puc gaudir a Barcelona d’un producte comercial concebut amb enginy, prenyat amb elegància i parit amb molta gràcia.
A “Mares! Maternitat a crits””, sentim una munió d’ídems voltant pel món amb determinació (excel·lent Vanessa Segura com a musulmana agressora-impostora dels seus occidentalitzats fills), trencant el binomi “vellesa-mauleria” (irresistible Lloll Bertran com a besàvia molt trempada), impartint sessions magistrals sobre la doma de les temibles filles polítiques (deliciosa Mireia Gubianas), aprenent a estimar amb coneixement de causa els seus fills diferents (superba Sandra Monclús en un monòleg antològic per la seva conjunció modèlica de comicitat, pedagogia i emotivitat amb llicó moral inclosa molt escaient) i avançant amb il·lusió cap al replantejament actual de la figura ja no necessàriament femenina (refrescant Óscar Jarque com a “papi-mami”).
Tot plegat en mans d’un sensible Oriol Tarrasón, que enfila un seguit d’esquetxos amb una posada en escena refinada (música exquisida, escenografia funcionalment moderna, llum distingida), unes eficaces transicions i l’afany de divertir sense més pretensions que la de caricaturitzar aquest cosmos tan ridícul en què s’ha convertit avui dia la Família palesant (tot i que qui podria haver-ho oblidat?) l’obligació de demanar disculpes als altres per tenir-la.
És cert que el to general de les històries és convencional, però també que la subtilesa s’escapa per algunes escletxes i, a més, el número final resulta tan encisador i festiu que, a la sortida de la funció, vaig frisar per trucar a ma mare i li vaig preguntar si havia quedat per sopar…
Un porcentaje nada despreciable de las obras de teatro que se estrenan en Barcelona acostumbran a ser de reestrenos o actualizaciones de obras ya estrenadas anteriormente. En el ámbito del musical esto lo podemos ver con reestrenos como T’estimo, ets perfecte, ja et canviaré; el anuncio de la programación en septiembre del archifamoso Mar i cel de Dagoll Dagom o el estreno el 16 de enero de Germans de Sang, espectáculo musical que se prorroga en el Teatre del Raval hasta el próximo 30 de marzo.
Germans de sang, creada en el año 1982 por Willy Russell para una función escolar, es sin duda uno de los musicales más queridos por el público barcelonés. El espectáculo ya hizo temporada en el Teatre Condal en el año 1994 tras lo cual inició una gira por Cataluña. Ahora Teatre del Raval revisita un éxito musical del pasado en clave de pequeño formato adaptable a los condicionantes de la sala en cuestión. Para la ocasión ha recuperado, además, a dos de los miembros del elenco original, Roger Pera y Sergi Zamora, para interpretar a los mismos personajes que ya encarnaron hace veinte años, acompañados en esta ocasión por Virginia Martínez, Xavier Ribera-Vall, Eduard Doncos o Lucia Torres, todos ellos dirigidos por Ricard Reguant.
Germans de sang narra la historia cautivadora y conmovedora de dos hermanos gemelos separados por necesidad poco después de nacer. Ambos son educados en familias y en ambientes sociales muy diferentes. Aunque sus madres, la natural y la adoptiva, se esfuerzan para impedir que sus vidas se crucen, algo que podría perjudicar a todos los implicados, Mickey y Eddie acaban haciéndose grandes amigos y enamorándose de la misma chica. Toda una serie de coincidencias que conducirán a la tragedia provocada por la impredecible alteración de los designios del destino.
La obra es un musical de pequeño formato que adopta la estructura de una tragedia (o tragicomedia) clásica en la que el héroe, en este caso los héroes protagonistas, se enfrentan a un destino desdichado que no puede más que resolverse fatal para ambos. Por esta razón el espectáculo opta también por un formato clásico en el que la acción que se desarrolla sobre el escenario tiene su contrapeso en el coro, en este caso musical, representado por Xavier Ribera-Vall, que encarna la figura del destino airado que se esfuerza por castigar a aquellos que osan incumplir sus inapelables sentencias. Todo ello con el barniz de cuento de hadas también infortunado al hacer la obra constantes referencia al “baile” y a la figura de Marilyn Monroe, hecho que prefigura de alguna forma el final funesto de la trama.
El espectáculo apuesta por reducir el boato técnico y escénico manteniendo, sin embargo, el brío y el número de actores y actrices. De esta forma la música en directo se limita al piano interpretado por Dani Campos, que ofrece un genial acompañamiento a la acción que transcurre sobre el escenario, y la escenografía se reduce a lo mínimo, con una serie de paneles móviles que recuerdan y mucho a los usados en la producción escénica de Boig per tu en la Sala Barts, dirigida también por Ricard Reguant. La solución aunque es práctica y sobre todo económica, no ayuda al espectador a «meterse» en la obra, ideada, me imagino, para contener algún medio escenográfico descriptivo.
Si en al ámbito de la producción el espectáculo es algo deficiente, el apartado interpretativo y musical es el acertado. A este respecto hace falta indicar que el elenco original ha sido alterado debido a «incidencias anímicas» sufridas por el actor Roger Pera, que motivaron su substitución por Benjamín Conesa, que interpreta a Mickey, uno de los hermanos gemelos. Este hecho, sin embargo, no ha afectado a la calidad del producto, ya que las interpretaciones musicales del reparto destacan por su calidad, incluso la del propio Conesa, que imprime a su papel un muy agradable touch cómico, sobre todo al inicio de la representación, y la de Zamora, que encarna a su hermano gemelo. Si bien, este último también ha sido substituido por Oscar Jarque tras la prórroga del espectáculo debido a compromisos laborales. A ellos se suma una espectacular y bella Virginia Martínez, que encarna a la madre de los gemelos en cuestión; Ira Mateu que interpreta a la necesitada y rencorosa señora Lyons o Eduard Doncos, que da vida a Sammy, el «travieso» hermano de Mickey. A destacar también, la presencia de Xavier Ribera-Vall que encarna a una especie de destino aciago que se cierne sobre la vida de los gemelos y que repite el fatídico tema musical con un tono de voz portentoso a lo largo de la representación. Bien que también ha sido substituido por Albert Estengre en la prórroga del espectáculo, debido, como en el caso de Zamora, a compromisos profesionales.
La propuesta, por otro lado, consigue seducir al público que aguarda largas colas en las puertas del teatro del Raval y que ocupa todas y cada una de las butacas disponibles (se ha colgado el cartel de entradas agotadas en la mayoría de las funciones que quedan del espectáculo!!). Un público que además no se va decepcionado, algo que se nota por el ímpetu de los aplausos finales que poseen una intensidad difícil de ver hoy en día.
Germans de sang nos permite de esta forma actualizar una clásica tragedia griega mudando su configuración a las necesidades del teatro actual y rescata del olvido escénico uno de los grandes éxitos del teatro hecho en catalán, que convence al espectador debido a la magia de sus canciones, a lo acertado de sus interpretaciones y a lo instructivo y estremecedor de su argumento.
Autor y Compositor: Willy Russell
Director: Ricard Reguant
Director musical: Dani Campos
Adaptación catalana: Albert Mas-Griera
Reparto: Benjamí Conesa, Òscar Jarque, Virgínia Martínez, Albert Estengre, Eduard Doncos, Ariadna Suñé, Isa Mateu, Dani Claramunt e Irene Gil
Música: Dani Campos
Iluminación: Pol Turrents
Diseño de sonido: Ernest Peral
Coreografía: Marisa Gerardi
Vestuario: Aitziber Sanz
Escenografía: Cata Munar
Producción: Germans de Sang y Teatre del Raval
Horarios: jueves y viernes a las 20:30 horas; sábados a las 18:00 y a las 21:30 horas y domingos a las 18:00 horas. Precio: 22 € Duración del espectáculo: 2 horas y 20 minutos (con descanso incluido= Idioma: catalán
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El pasado jueves 15 de marzo se estrenó en el espacio escénico de la Nau Ivanow Deflacionable, la nueva reflexión teatral que Daniel J. Meyer realiza sobre las consecuencias sociales y económicas de una ruptura amorosa.
Meyer presenta lo que se podría considerar la secuela de Descartable, obra que se estrenó el año pasado también en la Nau Ivanow y que fue representada por los componentes de la compañía Descartable Teatre. Si en su anterior trabajo éramos testigos del día a día de una joven pareja vencida por la inercia y las imposiciones propias de nuestros tiempos, en Deflacionable asistimos a la ruptura de la relación, y más concretamente a la «fiesta del divorcio» de la pareja formada por Víctor y Ana. Y como buena fiesta de divorcio, el espectáculo se representará en un espacio poco convencional que no es otro que el bar de la Nau Ivanow, en donde los propios integrantes de la compañía nos invitan a tomar una copa (recuerden, estamos en una fiesta!!) y nos animan a fotografiarnos (recuerden, estamos en una celebración familiar).
Una vez que cada uno de nosotros ocupa su asiento, da inicio la fiesta-representación. En ella los rituales sociales se invierten. Estarán presentes Ana y su madre, Víctor y su nueva pareja, Fernando, y un showman-presentador que dirigirá todo el cotarro. Es en este momento en el que se mostrarán las voluntades y los objetivos de todos los asistentes a la fiesta: Ana quiere quedarse con la casa que compartió con Víctor, pero para ello ha de pagar la mitad de su valor a su ex-pareja. Víctor necesita el dinero para entregárselo a Fernando para que éste pague la hipoteca de la vivienda donde vivirán juntos. Todo un dominó dinerario que se rompe cuando el banco deniega a Ana el préstamo que ha solicitado, a pesar de los altos ingresos generados de su profesión como arquitecta (una clara referencia a la impune crisis económica en la que vivimos). Esta denegación pondrá en marcha las ambiciones y la codicia de todos los asistentes a la fiesta, en un combate entre todos por hacerse con los recursos necesarios para materializar sus deseos cueste lo que cueste.
Meyer nos proporciona con Deflacionable más material para el debate socio-teatral y disecciona, de nuevo, el mundo de la pareja, de la familia y el papel del hombre y la mujer en el mundo actual. Para ello nos presenta su nueva obra como si fuera un reality show, un formato al que estamos más que acostumbrados gracias a la programación de muchos canales de televisión. El espectador se comporta como un voyeur contemplando todo lo que pasa en la fiesta de divorcio de Víctor y Ana, y como cada uno de los personajes se mueve con el único objetivo de realizar sus deseos egoístas, una clara crítica al sistema capitalista en el que vivimos sumergidos. En escena se nos mostrarán la avaricia y el deseo generado por el dinero; la incapacidad de amar realmente al otro y por lo tanto la facilidad con la que cambiamos de pareja o lo devaluado de conceptos como el amor o el compromiso; el consumo de alcohol como substitutivo y medicina ante nuestros fracasos impuestos por el propio sistema, que necesita de fracasados para su normal funcionamiento; y como no, la dependencia que cada vez más tenemos de la omnipresente tecnología, materializada con el formato de reality show televisivo que adquiere la obra.
El objetivo de cada uno de los protagonistas les llevará, incluso, a traicionarse a sí mismos y a los otros, aunque para ello se vean obligados, en una de las escenas más despiadadas de la obra, a vender en porciones al hijo fruto de la relación «in extremis» entre Víctor y Ana, llamado oportunamente Provecho. Una cruel metáfora del capitalismo llevado hasta sus últimas consecuencias.
El espectáculo diseñado por Meyer y la compañía Descartable Teatre se propone objetivos ambiciosos, si bien se queda a medio camino en su consecución. La obra es arriesgada aunque su materialización escénica no llega a las cotas que alcanzó su anterior trabajo Descartable. Si en aquélla la realización y el lenguaje teatral mantenían una delicada puesta en escena, en Deflacionable el formato está menos «pulido» y el avance de la representación es algo más disparatado, hecho éste que descoloca al espectador en más de una ocasión.
La obra posee un destacable componente de interacción con el público, al que saca del espacio escénico habitual para ubicarlo en un bar/cantina, un lugar más próximo y cotidiano para la mayoría de espectadores. Aunque esta ganancia se desvanece con las dificultades de visualización desde algunos sectores de la improvisada platea. Por lo que respecta a las interpretaciones de los jóvenes integrantes de la compañía, parece que les falta algo más de pulimento en general, algo que no ha de extrañar debido al poco rodaje del espectáculo. No obstante cabe destacar la interpretación como showman-presentador de Marc Pociello, que nos guiará a lo largo de la representación ejerciendo como anfitrión del espectáculo, y la comicidad de Sónia López, que le da a la obra un toque de humor muy sui generis!!
Deflacionable es un buen ejercicio de crítica social manufacturado por una compañía y un director familiarizados con el género, aunque su composición final no alcanza las cotas esperadas. Aún así se convierte en un producto necesario en una época como la nuestra en la que el compromiso, el amor, la buena voluntad y la amistad se agrian día a día contaminadas por la hediondez resultante de una forma de organización económica, política y social que nos embrutece día a día, y que de momento, por desgracia, parece no tener fecha de caducidad.
“Deflacionable” se representa en el Espacio Guillot la Nau Ivanow del 15 al 25 de marzo de 2012.
Dramaturgia y dirección: Daniel J. Meyer
Intérpretes: Laia Pellejà, Oscar Jarque, Sonia López, Rafa Delacroix y Marc Pociello
Iluminación: Natalia Ramos
Vestuario: Gimena González
Escenografía: AUS3
Diseño Gráfico: AUS3
Producción: DESCARTABLE TEATRE
Duración de la obra:70 minutos
Idioma: castellano y catalán
Género: comedia
Especificaciones: Fiesta de divorcio con copas incluidas
Entradas: A la venta en Atrapalo, Telentrada o en taquilla (con o sin copa)
Descartable teatre regresa a la Nau Ivanow para presentarnos su nuevo trabajo, Deflacionable, una nueva disección de la pareja, de la sociedad actual y de las tendencias destructoras que afectan a nuestra realidad más cotidiana.
Deflacionable se desarrolla íntegramente en la fiesta de divorcio de Víctor y Ana, bajo la forma de una fiesta de casamiento. El conflicto es el pago, por parte de Ana, de la mitad de la casa en la cual convivían, para poder continuar viviendo. No posee el dinero y, a pesar de sus altos ingresos, los bancos le deniegan el crédito. Su madre actúa como confidente pero no ofrece soluciones prácticas a su hija. Fernando, el amigo de Víctor, espera también el dinero puesto que lo utilizará para el pago de la hipoteca de su casa, en la cual vivirán ambos. Fernando se enterará de la falta de dinero de Ana pero no llegará a decírselo a Víctor puesto que las estrategias de cada uno de los personajes para obtener el dinero ya estarán activadas y las consecuencias catastróficas, ya gestadas.
Los líos serán variados y nos permitirán apreciar que para cada uno de estos personajes maquiavélicos “el fin justifica los medios” aunque, paradójicamente, en ningún momento se plantean justificarlos.
El quinto personaje es un presentador/anfitrión que también hará de camarero. Este personaje se irá transformando en un showman que nos desvelará que estamos presenciando un reality show donde todo sirve para conseguir los objetivos monetarios. Será el conductor de la obra, el que produzca el extrañamiento brechtiano con el público, quién nos aleje de la ficción y nos transporte a otra ficción con un lenguaje ajeno al teatro y a la vida misma.
Daniel J. Meyer nace en Buenos Aires, donde estudia a COSATYC/ANDAMIO 90 y se especializa en dirección e interpretación. Complementa sus estudios teatrales con los de producción musical. El año 2003 se instala en Barcelona y participa en varios cursos de dramaturgia y dirección. Además, participa en el posgrado de Producción y Gestión de espectáculos en la UB. Ha trabajado en Sin noticias de Gurb, con Rosa Novell; ayudante de dramaturgia y dirección en Èdip 1,2,3,4, en el Versus Teatre (bajo la dirección de Josep Galindo y dramaturgia de Pablo Ley); ayudantía de dirección de: Si avui és diumenge demà és dijous; Boeing Boeing (con dirección de Alexander Herold), El senyor de les mosques (dirección de Abel Coll) y de La doble vida d’en John (dirección de Àngel Llàcer). Es ayudante en Geronimo Stilton, el musical, de Àngel LLàcer y Manu Guix.
Ha escrito y dirigido con Descartable teatre, compañía de teatro de la cual es fundador, Descartable, estrenada el año pasado en la Nau Ivanow y Daian&Giggy LIVE SEX, estrenada en el Festival Fora de Temporada de Girona también en el 2011.
Descartable teatro Es la compañía de Daniel J. Meyer y Laia Pellejà. Cuenta con colaboradores permanentes, como Natalia Ramos (en el ámbito de la iluminación) o el actor Rafa DelaCroix. La compañía tiene como objetivo crear espectáculos que acerquen las artes escénicas a aquel público que no está habituado a ellas o que actualmente no ve reflejadas sus inquietudes culturales. Es por eso que apuesta siempre por un lenguaje directo y multidisciplinario, de acuerdo con la sociedad contemporánea.
«Deflacionable» se representará en el Espacio Guillot la Nau Ivanow del 15 al 25 de marzo de 2012.
Dramaturgia y dirección: Daniel J. Meyer
Intérpretes: Laia Pellejà, Oscar Jarque, Sonia López, Rafa Delacroix y Marc Pociello
Iluminación: Natalia Ramos
Vestuario: Gimena González
Escenografía: AUS3
Diseño Gráfico: AUS3
Producción: DESCARTABLE TEATRE
Duración de la obra: 70 minutos Idioma: castellano y catalán Género: comedia Especificaciones: Fiesta de divorcio con copas incluidas Entradas: A la venta en Atrapalo, Telentrada o en taquilla (con o sin copa)