Si les he de ser sincero la obra Al galop me interesó inicialmente por dos razones. La primera por ver a Carme Elias defendiendo un personaje y una propuesta muy diferentes a las que estoy acostumbrado a ver de ella. Y la segunda por conocer el Teatre Akadèmia, una sala escénica que inició su andadura en marzo del 2010 y a la que aún no había tenido la ocasión de asistir. Y la oportunidad era de las que prometían un goce teatral de gran intensidad.
Al galop nos propone un biopic de la vida de Diana Vreeland, columnista y editora de la sección de moda de revistas como Harper’s Bazaar y Vogue, en la que ella misma se nos ofrece como cicerone narrativo. La obra da inicio con el regreso de la protagonista de un largo viaje por Europa, tras haber sido despedida como redactora jefe de la revista Vogue. Diana está preparando una importante cena con amigos y conocidos para esa misma noche, en la que quiere dar un último empujón a su carrera profesional. Aún así tendrá tiempo para compartir algo de tiempo con los espectadores en el salón de su piso en Nueva York y narrarnos su peculiar experiencia vital y profesional.
Al galop es un espectáculo de muchas estrellas, tanto en la elección de la temática, como en la presentación del espectáculo y, por supuesto, por la caracterización y la interpretación de Carme Elias, su única protagonista. Con los ingredientes propios de una obra de pequeño formato, el público recorre no solo la vida, o mejor dicho, los recuerdos, de una gran dama de la moda, sino también la época en la que vivió. De esta forma el espectáculo nos permite rememorar el mundo de la primera y parte de la segunda mitad del siglo XX, justo hasta el momento en el que Vreeland fue despedida en Vogue, desde el punto de vista de la moda y de una visión chic de la realidad.
La representación se lleva a cabo de una forma muy próxima en la que el espectador mantiene una conversación muda con Vreeland, en donde nos hablará de su infancia, de su familia, de la relación con su marido, de sus primeros flirteos con las revistas, de su actividad profesional y de su situación emocional tras el despido en Vogue.
Carme Elias se convierte, así, en Vreeland, salvando con dificultad la diferencia de edad entre la actriz y el personaje en el momento en el que se sitúa temporalmente la obra, y nos recibe en un escenario transformado en el barroco y decadente salón del piso que aquella atesoraba en Nueva York. Un trabajo de escenografía excelente que nos transmite la singularidad del personaje. Sobre él Elias se transforma y realiza un auténtico tour de force no solo para convertirse en un espíritu libre y batallador como era el de Vreeland, sino para echarse sobre sus espaldas la representación del espectáculo. Y Elias lo hace muy bien, magníficamente bien, ayudada por el excelente texto escrito por Mark Hampton y Mary Louise Wilson y dirigido por Guido Torlonia, que le sabe dar al espectáculo y a la interpretación de Elias el toque íntimo, tragicómico y elegante que la obra necesita.
Así pues las ensoñaciones y los recuerdos de la Vreeland se irán entretejiendo con la triste realidad que la rodea: un despido ¿injustificado?; una cena con visos de ser un fracaso y una serie de relaciones afectivas que evidencian que el personaje protagonista lo dio todo por su visión de la vida y por su trabajo como columnista y editora de moda en algunas de las revistas más importantes del momento y, lo más importante, que aún no ha tirado la toalla y que está dispuesta a rehacer su carrera cueste lo que cueste.
La obra nos traslada además, a los escenarios glamurosos de las soft-comedies americanas, aunque en este caso algo más tupidos y barrocos, en las que personajes como Frank Sinatra, Dean Martin, Rock Hudson o Doris Day nos mostraban unas vidas apacibles y despreocupadas, acompañadas de algunas de las melodías de más éxito de aquellos años. Una vinculación esta que se constata en la obra cuando Elias – Vreeland hace sonar en el tocadiscos uno de los temas de Sinatra, permitiendo a La voz apoderarse durante unos breves instantes del escario el Teatre Akadèmia. Un verdadero deleite escénico y musical.
Al galop es una pequeña joya teatral que pueden gozar hasta el próximo 25 de mayo y que nos permite conocer la vida de una fashion-maker que vivió una vida intensa y acalorada; y nos vuelve a demostrar el magnífico trabajo escénico de Carme Elias, a la que cuesta ver en personajes principales en el teatro, pero que demuestra un adn interpretativo de primer orden.
«Al galop» se representa en el Teatre Akadèmia del 6 al 25 de mayo de 2014.
Autores: Mark Hampton y Mary Louise Wilson
Dirección: Guido Torlonia
Intérprete: Carme Elias
Traducción: Joan Sellent
Diseño de escenografía: Ramon B. Ivars
Diseño de vestuario: Andrés Andreu
Diseño de iluminación: David Bofarull
Caracterización: Eva Fernández
Horarios: de miércoles a sábado a las 20:30 horas y domingos a las 18:30 horas.
Precio: miércoles y jueves 18 €; de viernes a domingo 22 €. disponibles decuentos.
Idioma: catalán.