Archivo de la etiqueta: Mittéï

Crítica cómic: Natacha, François Walthéry, Dolmen editorial

NatachaNatacha es un personaje surgido del cómic franco-belga que se empezó a publicar en la revista Spirou en 1970 de la mano del guionista y dibujante François Walthéry, con guión en las primeras historias del también guionista y dibujante Gos.

Walthéry concibió a Natacha como una guapa, joven y desenfadada azafata propensa a meterse en líos y vivir aventuras allá donde viajaba como azafata de avión, acompañada en muchas ocasiones del aturdido y algo alocado auxiliar de vuelo Walter, que no duda en seguirla debido a la amistad que los une y a sus evidentes encantos. Ambos son los dos personajes principales del serial.

Natacha es un personaje femenino fuerte, independiente y de acción, algo que no era frecuente encontrar en una protagonista en la bande dessinée de aquellos años y mucho menos con curvas, por lo que fue un éxito desde que apareció y ya cuenta con 22 álbumes publicados hasta la fecha.

El personaje no es muy conocido en España ya que su publicación fue muy corta: un par de álbumes en 1978 en la editorial mejicana Novaro y en algún número de la revista Super Spirou Ardilla en 1980. Pocas apariciones que supieron captar, sin embargo, la atención de los lectores que la descubrieron, en parte porque se escapaba de los estándares físicos femeninos del tebeo juvenil a los que se estaba acostumbrado por aquel entonces.

Natacha-azafata-1-pag-42144 años después de su creación Natacha aterriza como es debido en España de la mano de Dolmen Editorial. Es decir, presentada en cuidados tomos desde el principio de sus aventuras y complementándose con interesantes extras, igual que en la edición original. A diferencia del también recomendable tomo de Los Hombrecitos, en el que algunas historias no tenían la calidad de impresión deseada por problemas de escaneos y originales, no hay peros en esta edición cronológica que es perfecta y que además posee una buena calidad de papel y de presentación.

Natacha ya era un cómic avanzado a su tiempo, los años 70, en lo que respecta a la narración, por lo que sigue siendo un cómic muy moderno y ágil al ser leído en la actualidad. No escatima en viñetas y dibujos de gran calidad por página y en las cuatro historias incluidas en este primer tomo ya se aprecia la evolución grafica de Walthéry, aunque parte de un nivel ya muy alto. No ocurre como en otras series clásicas de cómics en las que las primeras historias tienen un dibujo mucho más simple y arcaico. Esto se debe a que el autor ya era un genio del dibujo cuando inicio Natacha a la edad de 24 años.

En este primer tomo de Domen Editorial encontraremos pura aventura: historias policíacas, secuestros, selvas perdidas, malvados dictadores, disparos, persecuciones, acción y emoción sazonadas con una pizca de humor sutil:

Natacha, Azafata de vuelo. Guión: Gos. Dibujos: Walthéry (44 páginas)
El avión en el que vuela Natacha es secuestrado, lo que obliga a realizar un aterrizaje forzoso en una selva habitada por una peligrosa tribu de reductores de cabezas.

Natacha y el Maharajá. Guión: Gos. Dibujos: Walthéry (42 páginas)
Natacha y sus amigos se hallan practicando pilotaje de aviones ligeros y paracaidismo. El Maharajá Mamad Zarrad quiere reclutar a un grupo de estos expertos paracaidistas para fines turbios. Nuestra protagonista y su amigo Walter acabarán siendo acusados de espionaje e intentarán huir del país del Maharajá.

Un momento de pánico. Guión: Wasterlain. Dibujos: Walthéry (18 páginas)
Natacha y Walter se encuentran trabajando en un avión en el que han colocado una bomba. La tensión esta servida…

La memoria de metal. Guión y dibujo: Walthéry. Basado en una novela de Etienne Borgers. (26 páginas)
Una azafata amiga de Natacha implora la ayuda de esta al verse perseguida por dos peligrosos hombres que le reclaman un “objeto”. Nuestra protagonista se verá atrapada en una espiral de violencia para salvar su vida, mientras intenta resolver el misterio que esconde ese “objeto”.

François Walthéry
François Walthéry

Como se puede observar, aunque Walthéry está al frente de la parte gráfica, la serie ha contado con guionistas de la talla de Gos, Peyo, Maurice Tillieux, Raoul Cauvin, Mittéï y Marc Wasterlain, pero sin perder la esencia del personaje ni la cohesión de la historieta.

Natacha aparece en un momento de la primera aventura amordazada, y es que su creador juega con el morbo y el erotismo suave que desprende su sexy personaje sin proponérselo, presentándola en situaciones aparentemente inofensivas, como atada para que no escape. Una baza es su atractivo erótico que ha encandilado a miles de lectores. La ultima historia del tomo, La memoria de metal, es la más completa en relación al argumento y al trabajo artístico. Es trepidante y con un ritmo muy cinematográfico. Y nos deja con ganas de leer nuevas historias de esta azafata.

Los extras que ocupan un total de 20 páginas, están muy bien y además de relatarnos la biografía de Walthéry y el proceso de creación del personaje, informan al lector de anécdotas y curiosidades de las historias incluidas en el tomo. Impagable y potente la viñeta en broma que le mostraron al editor Charles Dupuis, y que luego sirvió para ilustrar la revolución sexual en el cómic belga.

Los tomos de Natacha aparecerán en Dolmen editorial en principio cada tres meses. Así que ya lo sabes, si te gustan los cómics clásicos del estilo de Spirou y Fantasio, no dejes pasar esta oportunidad!!

Titulo: Natacha
Guionista: Gos, Wasterlain, Etienne Borge
Dibujante: Walthéry
Encuadernación: Cartoné
Tomo 1
Editorial: Dolmen Editorial
Paginas: 160
Precio: 29,95 euros.
——

Taradete

Crítica cómic: Los Hombrecitos (Les Petits Hommes), Pierre Seron, Dolmen Editorial

LOS-HOMBRECITOS_portadaDolmen Editorial ha publicado el primer tomo de la serie Los Hombrecitos (Les Petits Hommes). Esta serie franco-belga de aventuras y humor fue creada en el lejano1967 por Pierre Seron a la edad de 25 años, en colaboración con los guionistas Albert Desprechins y, más tarde, Mittéï, que utilizaba el seudónimo Hao, y finalizó en el año 2010 antes de retirarse de la profesión su creador Pierre Seron.

En España los más mayores del lugar la pudieron descubrir en la revista Spirou-Ardilla (1979) de la Editorial Mundis, que publicó dos historias largas. Cinco años más tarde se volvió a saber de ella con la edición de cuatro nuevas aventuras de Los hombrecitos en aquella revista de páginas suaves y muy finas llamada Fuera Borda (1984) de la editorial Sarpe. En 1991 Ediciones B publicó un solo tomo rebautizando la serie con el nombre de Los Peques. La historieta de esta serie “El Éxodo” encandiló a los lectores españoles y se publicó en las tres editoriales ya citadas, y eso que no es ni de lejos la mejor de todas. Ahora, gracias a Dolmen Editorial, por fin podremos descubrir poco a poco las otras cincuenta historias de Los Hombrecitos. Hemos tenido que esperar unos 30 años y aunque exteriormente ya no somos niños, este es un tomo de cómic tradicional para todos los públicos que aguanta muy bien el paso del tiempo. Y Seron a medida que avanzaba la serie, gracias a la renovación y experimentación gráfica que fue introduciendo en ella, aunque sin llegar a ser tan popular como otras, la convirtió en un cómic de culto.

A grosso modo la trama de Los Hombrecitos se inicia en el pueblo de Rajevols. Un científico descubre un pequeño meteorito en el patio de su casa. Al tocarlo el hombre se hace pequeño, pero es que además a todos los que toca también empequeñecen. En poco tiempo los habitantes del pueblo quedan reducidos al tamaño más o menos de un pitufo y tienen que irse a vivir a un lugar nuevo y más apropiado para sus nuevas estaturas. La aventura sazonada con humor comienza…

La edición de Dolmen editorial.

El tomo publicado por Dolmen recopila las primeras 6 historietas publicadas de forma cronológica. Algunas permanecían inéditas en España:

Alerta en Eslapión (30 páginas)
Los militares quieren construir un campamento justo encima de la ciudad de Eslapión que es el conjunto de cisternas subterráneas donde habitan los Hombrecitos. Renaud y sus amigos emprenden una carrera a contrarreloj de sabotajes para impedirlo, pero no es fácil con su tamaño. En esta historia en un flash-back se narra por qué los hombrecitos son pequeños. Esta fue la primera historieta publicada en capítulos en la revista Spirou en 1967.

Los fugitivos (30 páginas)
No todo el mundo es un buen ciudadano en Eslapión, por eso en la ciudad también existe una prisión. Berto y Gus consiguen fugarse de ella y ante el temor de que por su culpa, los «grandes» los descubran, Renaud y otros hombrecitos inician su persecución.

El hombre que ríe (30 páginas)
El hombrecito Gustavo encargado de recolectar champiñones, un alimento muy apreciado por nuestros héroes, tiene unos extraños síntomas: no puede parar de reír. Los médicos de Eslapión no saben que hacer, así que ha llagado la hora de buscar ayuda medica del exterior.

El gallo en su salsa (20 páginas)
Los Hombrecitos quieren construir una piscina en su ciudad. En el transporte aéreo nocturno de bloques de mármol para la nueva piscina, una de sus naves se estrella contra una veleta en forma de gallo en la iglesia de “los grandes” de Rajevols. Esto ha provocado destrozos que no han de ser descubiertos.

Pascuas para dos niños (6 páginas)
Historia corta en que los Hombrecitos ayudan a una familia a tener un día de Pascua como la tradición belga manda.

Ratones y hombrecitos (44 páginas)
Debido a un accidente los Hombrecitos se quedan sin un bien muy preciado: azúcar. Tendrán que realizar una incursión a Rajevols en su busca. En su regreso una de las naves no funciona bien y comprobarán que sin ella las distancias son mucho mayores para los Hombrecitos.

los hombrecitos PAG-17En este recorrido que presenta el tomo vemos como el dibujo de Seron se va soltando y evolucionando en cada historia. Los fondos se van haciendo más completos y los dibujos más detallados y dinámicos en cada aventura. Su dibujo más moderno se asemeja al del gran dibujante André Franquin, esto es, un dibujo atractivo y simpático que ya entra de primeras. Por otro lado las siguientes tramas ya no serán tan sencillas y poseerán más misterio y emoción. Otro punto a favor de la serie son los graciosos juegos de palabras que ya aparecen en este primer tomo.

Según afirma la crítica, con la llegada del guionista Mittéï la serie ganó en aventura y ritmo y a partir de que Pierre Seron cogió en solitario las riendas de la serie, esta mejoró todavía más convirtiéndose en una gran obra del noveno arte. Se introducen grandes decorados, maquinas y naves de ciencia ficción, más humor y emocionantes aventuras. También se va profundizando en la parte humana de los personajes. Seron experimenta con el leguaje del cómic, innovando y sorprendiendo al lector. Algo que ya asomaba tímidamente en los primeros números que aparecen en este tomo, en el que se juega con la barrera entre la realidad y la ficción. En un momento dado en una historieta se ve un cómic tirado en el suelo abierto por una pagina en la que observamos una viñeta de una anterior aventura de Los hombrecitos (página 134); en otra secuencia un hombrecito transporta un álbum de Spirou (página 64). Otra parte que hace interesante la saga es la sorprendente combinación de naturaleza y tecnología en forma de naves y vehículos muy de ciencia ficción.

Los Hombrecitos primeras historias se lee de forma amena pero hay que tener en cuenta que han pasado 44 años desde que las historietas fueron creadas y que con los números publicados por Dolmen la serie estaba arrancando. Este tomo tiene, sin embargo, su valor histórico y lo mejor está por llegar con más acción y humor.

El volumen de Dolmen Editorial es muy atractivo con 193 páginas en papel grueso de calidad y en tapa dura al estilo de los de Johan y Pirluit. Esta línea editorial llamada Fuera Borda, en homenaje a los más viejos del lugar, es toda una gozada. Incluso se han publicado las portadas originales, algo que no tiene la edición original de Dupuis. El tomo se complementa con 19 páginas de extras para saber más de la serie. El único punto negativo es que la calidad de impresión de alguna historieta, como por ejemplo “Los fugitivos”, no es la óptima, pero es lo máximo que la editorial ha podido conseguir ya que el material de origen de Dupuis provenía de escaneos, y aún así esta parte ha quedado mejor que en los propios tomo de Dupuis. En el futuro esto solo ocurrirá con alguna historieta corta. De todas formas Fernando Fuentes, rotulista y diseñador de estos tomos, nos lo explica mejor:

pagina-de-extras-los-hombre«Como bien dices los materiales originales estaban escaneados, menos la primera historia del tomo. Y eso, desgraciadamente se nota. Lo que hicimos es mejorar esos materiales dentro de lo posible: igualamos el nivel de tinta negra en todas las imágenes, y retocamos un poco la línea, dado que cuando se escanea de material impreso siempre pierde definición. Aún así, algunas imágenes escaneadas estaban peor tratadas en origen que el resto del material y de hay puede venir que algunas se vean mejor que otras«.

Los Hombrecitos primeras historias esta recomendado para todos los adultos que quieran disfrutar de una lectura entretenida y jovial e incluso puede llegar a gustar a los niños y jóvenes de hoy, si se les descubre a través de los mayores. Es lo que tienen los buenos clásicos.

Título: Los Hombrecitos. 1967 – 1970. Primeras Historias
Guión: Albert Desprechins
Dibujo: Pierre Seron
Editorial: Dolmen editorial
Formato: Libro cartoné, 188 págs.  21,5 x 28,5 cm, a color.
Precio: 29,95 €
——

Taradete