De tanto en tanto uno va al teatro esperando disfrutar, y disfruta. Cada vez cuesta más, se lo aseguro, pero a veces pasa. Y este es el caso de Señora de rojo sobre fondo gris, obra que se estrenó el pasado 1 de abril en el Teatro Romea, producida y dirigida por José Sámano e interpretada por José Sacristán.
«Nicolás, un pintor, con muchos años en el oficio, lleva tiempo sumido en una crisis creativa. Desde que falleció de forma imprevista su mujer, que era todo para él, prácticamente no ha podido volver a pintar».
La propuesta del Romea es intimista, casi familiar, en la que vemos a un Sacristán en modo monologo, a través de cuyas palabras brota el magnífico texto de Miguel Delibes, que nos traslada al año 1975, cuando la historia de España estaba a punto de cambiar de rumbo justo como la vida del protagonista.
La escenografía nos muestra un sencillo taller de pintor, allí donde el protagonista ha creado todos sus cuadros. Ahora no puede, la pérdida de su mujer le ha robado su espíritu creativo. En el taller predominan los colores grises, una evidencia de la condición espiritual en la que vive Nicolás y que marcará el avance del relato, acompañado de un juego de luces que intensificarán los momentos más emotivos de la representación.
El trabajo de adaptación de la novela al teatro, llevada a cabo por Sámano, Sacristán e Inés Camiña, es magnífico y resulta en un texto claro, vigoroso y a la vez cercano. Una adaptación que junto con la magnífica interpretación de Sacristán son las claves del éxito de la obra. El actor no se hace artificial en ningún momento y nos muestra en muchas ocasiones la emotividad del texto a través de su interpretación, que en determinadas situaciones se hace muy emocional, ya que seguro que el relato se vincula con la experiencia en la vida de cada uno de nosotros, aquellos momentos en los que la vida parece una cosa seca, sin valor y gris.
Asimismo, la adaptación se centra, sobre todo, en la detección y en el avance de la enfermedad en Ana, la mujer de Nicolás, y deja en un segundo plano las referencias a la política o la prisión de la hija de los protagonistas. La continua descripción de Delibes/Sacristán del avance de la enfermedad es auténtica lírica, solo sobrepasada por la descripción de los estados de ánimo por los que han de pasar los dos personajes, tanto Ana como Nicolás.
Y no puedo acabar esta crítica sin hablar de la dirección de José Sámano, que ha perfilado un trabajo sensible y eficaz interiorizado plenamente por Sacristán.
Señora de rojo sobre fondo gris es una delicia, es como se hacían las cosas antes o como se hacen las cosas bien ahora. Es una oportunidad que no se puede perder si le gusta el teatro, si le gusta Sacristán, si le gusta la literatura y, sobre todo, si le gusta Delibes.
«Señora de rojo sobre fondo gris» se representa en el Teatro Romea del 1 de abril al 12 de mayo de 2019.
Autor: Miguel Delibes
Director: José Sámano
Adaptación: José Sámano, José Sacristán e Inés Camiña
Reparto: José Sacristán
Escenografía: Arturo Martín Burgos
Vestuario: Almudena Rodríguez Huerta
Iluminación: Manuel Fuster
Sonido: Mariano García
Producción: Sabre Producciones, Pentación Espectáculos, TalyCual y AGM
Idioma: castellà
Duración: 1 hora y 30 minutos
Horarios: de lunes a sábado a las 20:30 horas y domingos a las 18:30 horas.
Precio: A partir de 17€
NOTA CULTURALIA: 9
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Jorge Pisa