Tras un discreto debut cinematográfico (Alien 3), David Fincher logró el reconocimiento unánime de los aficionados al thriller con Seven, un film que marcó un antes y un después en la historia de este género y del que ahora se cumplen veinte años. Este acontecimiento merecía una celebración a su altura, y el Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya decidió rendirle un particular homenaje en su pasada edición; además, y en colaboración con la editorial Tyrannosaurus Books, los responsables del festival apostaron por la periodista Desirée de Fez para que coordinara Seven. Los pecados de David Fincher, una serie de textos firmados por algunos de los mejores críticos del país –Ángel Sala, John Tones, Quim Casas, Fausto Fernández, Daniel Ausente, Noel Ceballos y Jorge Gorostiza– que repasan la película desde un punto de vista personal y emocional, y que sirven para analizar el camino que tomó el thriller tras su estreno en 1995.
Presentado por primera vez durante el festival, Seven. Los pecados de David Fincher vivió una segunda presentación el pasado 14 de noviembre en la Librería Gigamesh de Barcelona, a la que acudieron varios de los autores –Casas, Fernández y Ausente acompañaron a De Fez– y Juan Antonio Bayona, invitado por la coordinadora de esta obra porque tanto él como Fincher ‹‹han llevado al gran público películas que se mueven por código de género menos comercial››.
Así, en este volumen el lector encontrará las razones que han hecho de Seven un film de referencia, tanto en el ámbito cinematográfico –su impacto es evidente en películas posteriores de gran presupuesto, como El coleccionista de huesos o la saga Saw, tal y como precisa Desirée de Fez en su artículo– como en las series policíacas que se sucedieron a su estreno –Quim Casas recuerda que Millennium fue la primera en aprovechar el tirón de la película, aunque debieron pasar quince años hasta encontrar dos series con registros similares a la obra de Fincher: The Following y The Fall.
Por su parte, Daniel Ausente prefirió hablar sobre la parte religiosa de Seven, además de confesar que le obsesiona la idea de ciudad maldita, muy presente en ella, mientras que Fausto Fernández aportó su habitual nota de humor al reconocer su ‹‹simpatía por el cine que se equivoca, por aquellos que han hecho una castaña y creen que es una maravilla››, y por eso decidió escribir sobre las múltiples copias chapuceras y desvergonzadas que se hicieron tras ella –‹‹tiene mucha gracia que el primero fuera Steven Seagal››–, como Los ríos de color púrpura o Resurrection.
Inevitablemente, en Gigamesh surgió el nombre de otro titán del cine contemporáneo: Christopher Nolan, quien también cuenta con un ferviente número de seguidores. Sin embargo, y en opinión de los críticos presentes en la librería, David Fincher puede estar tranquilo: de él destacaron su capacidad para fascinar visualmente al espectador, su mentalidad de productor, su buen tino a la hora de elegir proyectos –‹‹Su olfato comercial es extraordinario››, afirmó Bayona–, además de mantener siempre el equilibrio entre el ritmo de la imagen y del texto, sin olvidar que es un director con mucho sentido del humor –‹‹Perdida es una gran comedia››, aseguró con rotundidad Fernández–, algo de lo que Nolan parece que no puede presumir.
Título: Seven. Los pecados de David Fincher
Autora: Desirée de Fez (Coordinadora)
Editorial: Tyrannosaurus Books
Fecha de publicación: Octubre de 2015
ISBN: 9788494444210
Páginas: 218 páginas
Precio: 18,00 €